Irán, situado justo al otro lado del Golfo Pérsico, pidió también la liberación del líder, jeque Alí Salman.
Bahréin es la sede de la Quinta Flota estadounidense, que patrulla regularmente en el área. Washington también ha expresado honda preocupación por la detención de Salman, en un país aliado clave que vive turbulencias políticas desde 2011.
Tras las plegarias en las principales mezquitas del centro de la capital estallaron los primeros incidentes, según testigos. En días pasados los choques tuvieron lugar en suburbios de mayoría chiita.
La policía utilizó gas lacrimógeno para dispersar a los manifestantes, y hubo heridos y detenidos, según las fuentes.
Salman, de 49 años, lidera el movimiento Al Wefaq, y fue detenido el domingo y acusado de incitar al odio y la violencia.