Interrogado por la prensa sobre lo que esperada aprender de los éxitos y fracasos de sus antecesores, Obama respondió que esperaba aprender "de sus éxitos", antes de sentarse a almorzar con George W. Bush (2001-2009), Jimmy Carter (1977-1981), George H. W. Bush (1989-1993) y Bill Clinton (1993-2001).
"Es una reunión excepcional", dijo Obama, franqueado por Bush padre a su derecha y Bush hijo a su izquierda, en una relajada asamblea de presidentes.
"Los hombres que se encuentran aquí entienden los problemas así como las posibilidades inherentes al puesto. Tener la posibilidad de recibir sus consejos, sus buenos consejos, la camaradería con estos hombres es para mí algo extraordinario y les estoy muy agradecido", dijo Obama en el Salón Oval.
"Mi mensaje, que creo es compartido por todos, es que queremos que tenga éxito. Seamos demócratas o republicanos, todos queremos profundamente nuestro país y para nosotros es un placer compartir nuestras experiencias, en la medida de nuestras posibilidades", dijo Bush.
La imagen de los hombres que representan 30 años de historia de la primera potencia mundial es inédita en la Casa Blanca desde octubre de 1981, cuando el asesinato del presidente egipcio Anouar al-Sadate había reunido a Richard Nixon, Gerald Ford y Jimmy Carter entorno a Ronald Reagan, reveló la portavoz de Bush, Dana Perino.
Bush y Obama se reunieron a solas durante media hora en el Salón Oval antes del almuerzo.
Perino insistió sobre el carácter privado de las conversaciones de los ex presidentes con Bush y Obama.
"Evidentemente, no se concibe que la reunión se desarrolle sin que hablen de los problemas en Oriente Medio", dijo después de resaltar que todos los mandatarios se habían enfrentado a ese capítulo de las relaciones exteriores.
"Dado que la economía es una de las prioridades de todo el mundo, estoy segura de que también hablarán de eso", añadió.
Obama asumirá en un momento delicado, ya que heredará dos guerras, una recesión económica y además podría encontrarse con una grave crisis política debido a la ofensiva de su gran aliado israelí contra Hamas en Gaza.
La portavoz de Bush indicó que en un periodo de transición que algunos califican como el más difícil desde Abraham Lincoln (1861-1865), Obama y Bush ya han mantenido importantes contactos.
Perino recordó que los dos hombres hablaron por teléfono el 1 de enero. Después de las elecciones del 4 de noviembre, Bush llamó a Obama para informarle de las medidas que pensaba tomar contra la crisis financiera.
Bush y sus colaboradores consideran de suma importancia que la transición se realice de manera correcta e invocan las dificultades del momento así como el riesgo de que terroristas aprovechen el periodo de cambio para cometer atentados.
Obama recibe cada mañana los mismos documentos que Bush y la actual administración ha preparado planes de urgencia para el equipo de Obama.
El gobierno de Bush ha evitado escrupulosamente comentar las decisiones o intenciones de Obama, quien llegó el domingo a Washington después de unas vacaciones en Hawai y actualmente está alojado con su familia en el hotel Hay-Adams, situado frente a la Casa Blanca.
Del mismo modo, Obama ha expresado repetidas veces que sólo hay actualmente un presidente en ejercicio para evitar pronunciarse sobre el enfrentamiento entre Israel y Hamas.
Bush ya recibió una vez a Obama en la Casa Blanca el 10 de noviembre. En esa ocasión hablaron de la política interior y exterior.
Según Bush, que calificó de "momento histórico" la llegada de un negro a la Casa Blanca, fue Obama quien sugirió la reunión de todos los presidentes.
"Es una reunión excepcional", dijo Obama, franqueado por Bush padre a su derecha y Bush hijo a su izquierda, en una relajada asamblea de presidentes.
"Los hombres que se encuentran aquí entienden los problemas así como las posibilidades inherentes al puesto. Tener la posibilidad de recibir sus consejos, sus buenos consejos, la camaradería con estos hombres es para mí algo extraordinario y les estoy muy agradecido", dijo Obama en el Salón Oval.
"Mi mensaje, que creo es compartido por todos, es que queremos que tenga éxito. Seamos demócratas o republicanos, todos queremos profundamente nuestro país y para nosotros es un placer compartir nuestras experiencias, en la medida de nuestras posibilidades", dijo Bush.
La imagen de los hombres que representan 30 años de historia de la primera potencia mundial es inédita en la Casa Blanca desde octubre de 1981, cuando el asesinato del presidente egipcio Anouar al-Sadate había reunido a Richard Nixon, Gerald Ford y Jimmy Carter entorno a Ronald Reagan, reveló la portavoz de Bush, Dana Perino.
Bush y Obama se reunieron a solas durante media hora en el Salón Oval antes del almuerzo.
Perino insistió sobre el carácter privado de las conversaciones de los ex presidentes con Bush y Obama.
"Evidentemente, no se concibe que la reunión se desarrolle sin que hablen de los problemas en Oriente Medio", dijo después de resaltar que todos los mandatarios se habían enfrentado a ese capítulo de las relaciones exteriores.
"Dado que la economía es una de las prioridades de todo el mundo, estoy segura de que también hablarán de eso", añadió.
Obama asumirá en un momento delicado, ya que heredará dos guerras, una recesión económica y además podría encontrarse con una grave crisis política debido a la ofensiva de su gran aliado israelí contra Hamas en Gaza.
La portavoz de Bush indicó que en un periodo de transición que algunos califican como el más difícil desde Abraham Lincoln (1861-1865), Obama y Bush ya han mantenido importantes contactos.
Perino recordó que los dos hombres hablaron por teléfono el 1 de enero. Después de las elecciones del 4 de noviembre, Bush llamó a Obama para informarle de las medidas que pensaba tomar contra la crisis financiera.
Bush y sus colaboradores consideran de suma importancia que la transición se realice de manera correcta e invocan las dificultades del momento así como el riesgo de que terroristas aprovechen el periodo de cambio para cometer atentados.
Obama recibe cada mañana los mismos documentos que Bush y la actual administración ha preparado planes de urgencia para el equipo de Obama.
El gobierno de Bush ha evitado escrupulosamente comentar las decisiones o intenciones de Obama, quien llegó el domingo a Washington después de unas vacaciones en Hawai y actualmente está alojado con su familia en el hotel Hay-Adams, situado frente a la Casa Blanca.
Del mismo modo, Obama ha expresado repetidas veces que sólo hay actualmente un presidente en ejercicio para evitar pronunciarse sobre el enfrentamiento entre Israel y Hamas.
Bush ya recibió una vez a Obama en la Casa Blanca el 10 de noviembre. En esa ocasión hablaron de la política interior y exterior.
Según Bush, que calificó de "momento histórico" la llegada de un negro a la Casa Blanca, fue Obama quien sugirió la reunión de todos los presidentes.