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Política
El secretario de la Conferencia Episcopal, Sócrates René Sándigo Jirón, advirtió que “ningún delincuente va a amedrentar ni a callar a la Iglesia Católica” por las críticas que hacen, mientras el Presidente de esa organización eclesiástica, el Arzobispo Leopoldo Brenes, aseguró que “hay preocupación” en el seno de la institución.
De esta manera, los obispos manifestaron su posición respecto de los incidentes que se produjeron recientemente en contra de monseñor Silvio Báez, a quien desconocidos lo intimidaron mostrándole armas de fuego, y de monseñor Jorge Solórzano, quien fue víctima del robo de su computadora.
“Las amenazas nos fortalecen”, subrayó el obispo de la Diócesis de Chontales y Río San Juan, Monseñor Sándigo. “Esto no hace que la iglesia se amedrente o se calle, por el contrario, en el cristianismo cuanto más lo presionan, cuanto más lo intimidan y más lo amenazan, más se fortalece (la iglesia católica) y mayor es el crecimiento de la presencia de Dios, hay como una multiplicación”.
“Acciones peligrosas”
El arzobispo Brenes afirmó que son peligrosos los robos cometidos por personas desconocidas en contra de altos dirigentes de la iglesia católica y estas acciones han despertado preocupación en la institución.
“Vemos que se han dado esos casos y los vemos como peligrosos, nosotros no queremos decir nada (sobre si se trata de espionaje) solamente externamos nuestra preocupación porque están dos (víctimas); está lo de monseñor (Jorge Solórzano) que lo miramos como una cosa que puede ser de ladrones, pero ahora nos preocupa lo de monseñor (Silvio) Báez”, aseguró Brenes.
Carballo: “Gobierno no espía a religiosos”
Por su parte, Monseñor Bismark Carballo, párroco de la iglesia Espíritu Santo, y muy cercano al Cardenal Miguel Obando y Bravo, consideró que actualmente hay un “síndrome de WikiLeaks” y no cree que el gobierno esté espiando a los religiosos.
“A mí me parece que ya la historia evolucionó, estamos en el siglo XXI y no creo que haya esa intención de querer estar haciendo resucitar una realidad que quedó en el pasado, me parece que ya estamos en otro contexto y ahora hay Internet y otros métodos más modernos de poder obtener informaciones, no creo que el gobierno esté recurriendo a un robo así”, indicó monseñor Carballo.
El párroco dijo que hace un año fue víctima de un robo cuando estacionó su vehículo en el parqueo de un supermercado. Los ladrones se le llevaron su ropa. “Mucho de nosotros hemos sido víctima de robo y a veces ni denunciamos para no estar perdiendo tiempo, que es la costumbre del nicaragüense, si cree que no va a lograr nada ¿para qué va a ir a denunciar?, en este diciembre se mueve mucha gente con ganas de buscar dinero”, señaló.
La iglesia nació mártir…
En tanto, monseñor Sándigo discrepó, en entrevista separada, con la apreciación de monseñor Carballo: “…No descartemos que sean cuestiones planeadas con el propósito de callar, no vamos a negar que hemos sido una institución crítica no hoy, sino siempre y no sólo en Nicaragua donde tengamos acontecimientos, vivencia, realidades que tengan que ser iluminadas desde la palabra de Dios.”
Agregó que “la Iglesia no puede callar en ninguna circunstancia, así nació, mártir… el cristianismo no es un concepto ni una ideología, es una experiencia de Dios que influye en la vida social, en el comportamiento de las personas, de las instituciones y de las naciones… nada de esto va a detener la iglesia en su afán de transformar la sociedad de negativo a positivo, de implantar el reino de Dios que es de amor y de justicia”.
Iglesia denuncia injusticias
Monseñor Carballo dijo que la iglesia católica no tiene intención de estar confrontando al gobierno, pero que anunciarán la verdad y denunciarán las injusticias, vengan de donde vengan. El arzobispo Brenes, por su parte, exhortó a la Policía Nacional a dar respuestas a estos casos, debido a que ya han pasado entre 11 días y un mes desde que ocurrieron los hechos e hizo un llamado a los delincuentes a que regresen los objetos robados, que, según él, son sólo de utilidad de los religiosos.
Asimismo, monseñor Brenes dijo esperar que el gobierno no sea quien esté detrás de los robos en contra de los religiosos y que se traten de hechos aislados. “Ninguno guardamos secretos en las computadoras, tenemos documentos de nuestros trabajos, nuestras cartas, no creo que alguien piense que escondemos algo; las computadoras las usamos para nuestro trabajo pastoral solamente”, afirmó Brenes.
Monseñor Sándigo en esa misma línea, señaló: “No quisiéramos llegar a pensar que se trata de algo programado o planeado porque estaríamos cayendo en una situación difícil”.
Expuso que los obispos y sacerdotes tienen “un compromiso para con Dios, para con la iglesia y para con la sociedad… es parte de nuestros ministerios, no podemos ser escurridizos a las realidades de Dios, de la iglesia y del mundo”, por esa razón “quisiéramos que estos acontecimientos fueran parte de esa realidad social nicaragüense donde se están dando actos de delincuencia y que también los hermanos obispos han sido víctimas”.
Pide orar por los Obispos
Pidió a esas fuerzas que reflexionen y mediten en sus conciencias y que cambien porque nunca es tarde para que den el paso de conversión y además pidió para que la feligresía católica ore por los obispos.
De esta manera, los obispos manifestaron su posición respecto de los incidentes que se produjeron recientemente en contra de monseñor Silvio Báez, a quien desconocidos lo intimidaron mostrándole armas de fuego, y de monseñor Jorge Solórzano, quien fue víctima del robo de su computadora.
“Las amenazas nos fortalecen”, subrayó el obispo de la Diócesis de Chontales y Río San Juan, Monseñor Sándigo. “Esto no hace que la iglesia se amedrente o se calle, por el contrario, en el cristianismo cuanto más lo presionan, cuanto más lo intimidan y más lo amenazan, más se fortalece (la iglesia católica) y mayor es el crecimiento de la presencia de Dios, hay como una multiplicación”.
“Acciones peligrosas”
El arzobispo Brenes afirmó que son peligrosos los robos cometidos por personas desconocidas en contra de altos dirigentes de la iglesia católica y estas acciones han despertado preocupación en la institución.
“Vemos que se han dado esos casos y los vemos como peligrosos, nosotros no queremos decir nada (sobre si se trata de espionaje) solamente externamos nuestra preocupación porque están dos (víctimas); está lo de monseñor (Jorge Solórzano) que lo miramos como una cosa que puede ser de ladrones, pero ahora nos preocupa lo de monseñor (Silvio) Báez”, aseguró Brenes.
Carballo: “Gobierno no espía a religiosos”
Por su parte, Monseñor Bismark Carballo, párroco de la iglesia Espíritu Santo, y muy cercano al Cardenal Miguel Obando y Bravo, consideró que actualmente hay un “síndrome de WikiLeaks” y no cree que el gobierno esté espiando a los religiosos.
“A mí me parece que ya la historia evolucionó, estamos en el siglo XXI y no creo que haya esa intención de querer estar haciendo resucitar una realidad que quedó en el pasado, me parece que ya estamos en otro contexto y ahora hay Internet y otros métodos más modernos de poder obtener informaciones, no creo que el gobierno esté recurriendo a un robo así”, indicó monseñor Carballo.
El párroco dijo que hace un año fue víctima de un robo cuando estacionó su vehículo en el parqueo de un supermercado. Los ladrones se le llevaron su ropa. “Mucho de nosotros hemos sido víctima de robo y a veces ni denunciamos para no estar perdiendo tiempo, que es la costumbre del nicaragüense, si cree que no va a lograr nada ¿para qué va a ir a denunciar?, en este diciembre se mueve mucha gente con ganas de buscar dinero”, señaló.
La iglesia nació mártir…
En tanto, monseñor Sándigo discrepó, en entrevista separada, con la apreciación de monseñor Carballo: “…No descartemos que sean cuestiones planeadas con el propósito de callar, no vamos a negar que hemos sido una institución crítica no hoy, sino siempre y no sólo en Nicaragua donde tengamos acontecimientos, vivencia, realidades que tengan que ser iluminadas desde la palabra de Dios.”
Agregó que “la Iglesia no puede callar en ninguna circunstancia, así nació, mártir… el cristianismo no es un concepto ni una ideología, es una experiencia de Dios que influye en la vida social, en el comportamiento de las personas, de las instituciones y de las naciones… nada de esto va a detener la iglesia en su afán de transformar la sociedad de negativo a positivo, de implantar el reino de Dios que es de amor y de justicia”.
Iglesia denuncia injusticias
Monseñor Carballo dijo que la iglesia católica no tiene intención de estar confrontando al gobierno, pero que anunciarán la verdad y denunciarán las injusticias, vengan de donde vengan. El arzobispo Brenes, por su parte, exhortó a la Policía Nacional a dar respuestas a estos casos, debido a que ya han pasado entre 11 días y un mes desde que ocurrieron los hechos e hizo un llamado a los delincuentes a que regresen los objetos robados, que, según él, son sólo de utilidad de los religiosos.
Asimismo, monseñor Brenes dijo esperar que el gobierno no sea quien esté detrás de los robos en contra de los religiosos y que se traten de hechos aislados. “Ninguno guardamos secretos en las computadoras, tenemos documentos de nuestros trabajos, nuestras cartas, no creo que alguien piense que escondemos algo; las computadoras las usamos para nuestro trabajo pastoral solamente”, afirmó Brenes.
Monseñor Sándigo en esa misma línea, señaló: “No quisiéramos llegar a pensar que se trata de algo programado o planeado porque estaríamos cayendo en una situación difícil”.
Expuso que los obispos y sacerdotes tienen “un compromiso para con Dios, para con la iglesia y para con la sociedad… es parte de nuestros ministerios, no podemos ser escurridizos a las realidades de Dios, de la iglesia y del mundo”, por esa razón “quisiéramos que estos acontecimientos fueran parte de esa realidad social nicaragüense donde se están dando actos de delincuencia y que también los hermanos obispos han sido víctimas”.
Pide orar por los Obispos
Pidió a esas fuerzas que reflexionen y mediten en sus conciencias y que cambien porque nunca es tarde para que den el paso de conversión y además pidió para que la feligresía católica ore por los obispos.
