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La UEFA había anunciado el jueves la apertura de un procedimiento disciplinario que será examinado el 30 de octubre debido al comportamiento racista de un grupo de aficionados del CSKA, que insultó al capitán del Manchester City, el marfileño Yaya Touré, el miércoles en partido de la Liga de Campeones.
El centrocampista africano se quejó al árbitro después de escuchar a los hinchas imitar el sonido de los monos en las gradas del Arena Khimki.
Pero Platini, que ha hecho de la lucha contra el racismo en los estadios una de sus prioridades, quiere saber la razón de que el árbitro no estableciera el protocolo anticomportamientos racistas.
Este protocolo consta de tres etapas: En la primera, en caso de gritos o cantos racistas, el árbitro debe parar el partido y solicitar por un micrófono que el comportamiento finalice.
Si los incidentes continúan cuando el partido se retome, el árbitro deberá suspenderlo y enviar a los dos equipos a los vestuarios, con otro anuncio mediante la megafonía del estadio.
Finalmente si el partido se reanuda y los incidentes siguen, el árbitro puede anularlo definitivamente.
La UEFA publicará los resultados de la investigación interna una vez que la instancia disciplinaria se pronuncie sobre el caso el 30 de octubre.
Touré, internacional marfileño, no descarta liderar un boicot al Mundial-2018 de Rusia: "Si no estamos tranquilos para venir a jugar el Mundial de Rusia, no vendremos", declaró según el diario The Times y la página de la cadena de televisión Sky.
Respecto a esa cuestión de un eventual boicot, el entrenador del Chelsea, Jose Mourinho, dijo que no sería adecuado.
"Respeto su opinión (la de Touré), pero estoy en desacuerdo", dijo Mourinho este viernes a los periodistas.
"La historia del fútbol la hicieron diversas razas y los jugadores negros han aportado una fantástica contribución a lo que el fútbol es hoy. Ir al Mundial es la mayor expresión para un equipo nacional, con razas y gente de diferentes partes del mundo, gente de todos los continentes", añadió.
