"Si alguien se retira de un acuerdo internacional, él es el perdedor, no quien no lo hace", afirmó Rohani durante una reunión de su gabinete.
"Atenerse a un acuerdo muestra la dignidad de un Estado y hasta qué punto es confiable su Gobierno", agregó. Según Rohani, Estados Unidos sufriría una gran pérdida de imagen si abandona el acuerdo, mientras que si permanece en él, sería una gran victoria para Irán.
Para el mandatario iraní, es importante la reacción que tengan los otros países firmantes del pacto (Reino Unido, Francia, Rusia, China y Alemania).
Rohani cree que Teherán no debe preocuparse y considera que debe actuar de forma racional. "Con el acuerdo nuclear adoptamos la decisión correcta en el momento correcto", afirmó, y ahora el país debe mostrar que cumple sus compromisos y mantiene el acuerdo internacional.
También el ministro de Exteriores iraní pidió hoy al Parlamento no reaccionar en exceso en la cuestión nuclear. Trump puede adoptar diversas decisiones pero no está claro cuál de ellas se implementará al cien por cien, afirmó Mohamed Yawad Zarif.
Teherán debe estar preparado para cualquier escenario pero todavía no tiene que tomar decisiones concretas, dijo Zarif tras una reunión con el Comité de Seguridad del Parlamento.
Se espera que el presidente estadounidense, Donald Trump, anuncie en los próximos días si abandona el acuerdo nuclear, ya que el domingo es la fecha límite para certificar si Irán cumple con el pacto.
Según medios estadounidenses, posiblemente Trump afirme que el acuerdo no va en interés de Estados Unidos. Según "The Washington Post", no abandonará por completo el acuerdo pero abriría la puerta a modificarlo.
El acuerdo, alcanzado después de años de negociaciones, tiene como objetivo limitar la capacidad de Irán de enriquecer uranio u otros materiales nucleares para fabricar armas atómicas y a cambio reduce las sanciones impuestas a Teherán.
Trump ha expresado reiteradamente su escepticismo en relación con el pacto, negociado por su antecesor, Barack Obama. El actual mandatario considera que el pacto no es lo suficientemente duro con Irán y en la reciente Asamblea General de la ONU lo calificó como "una de las peores y más unilaterales transacciones en las que jamás entró Estados Unidos".
La primera ministra británica, Theresa May, habló con Trump sobre el acuerdo y le advirtió de que tiene "importancia vital para la seguridad regional".
En una llamada telefónica que mantuvieron ambos mandatarios, May "reafirmó el fuerte compromiso del Reino Unido con el acuerdo, junto con sus socios europeos", afirmó el Gobierno británico en un comunicado.
"La primera ministra subrayó que es importante que el acuerdo sea monitorizado cuidadosamente e implementado correctamente", añadió Downing Street.