
"Los rebeldes dominan la situación, el ejército no ha resistido", afirmó un profesor entrevistado por la AFP en Kidal.
"Ayer lanzaron su ofensiva. Luego la suspendieron hacia las 20H00 (locales y GMT) y esta mañana la reanudaron y dominaron a las dos bases militares", añadió.
El jefe de la junta militar golpista, el capitán Amadou Sanogo, reconoció ante la televisión pública la toma de Kidal por grupos islamistas y rebeldes tuareg, afirmando que "el enemigo estaba en posición de superioridad", al estar mejor equipado que el ejército regular.
Precisamente, el equipamiento insuficiente del ejército era una de las razonas invocadas por los golpistas para derrocar el 22 de marzo al presidente Amadou Toumani Touré, al que acusaron de incompetente ante la rebelión en curso desde enero en el norte de Malí.
En otro comunicado leído en la televisión pública, el capitán Sanogo prometió que el ejército se está preparando "para regresar" a Kidal.
Por la mañana, el capitán Sanogo consideró que la situación era "crítica" en el norte de Malí a causa del avance de los rebeldes tuareg y de los islamistas, ante los cuales el ejército necesita "apoyo" exterior.
La ciudad de Kidal está ahora controlada por el grupo islamista Ansar Din, que aportó la mayor parte de las fuerzas en la batalla. Según testigos, también participaron en el ataque combatientes de Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) y los rebeldes tuareg del Movimiento Nacional de Liberación del Azawad.
"Ayer lanzaron su ofensiva. Luego la suspendieron hacia las 20H00 (locales y GMT) y esta mañana la reanudaron y dominaron a las dos bases militares", añadió.
El jefe de la junta militar golpista, el capitán Amadou Sanogo, reconoció ante la televisión pública la toma de Kidal por grupos islamistas y rebeldes tuareg, afirmando que "el enemigo estaba en posición de superioridad", al estar mejor equipado que el ejército regular.
Precisamente, el equipamiento insuficiente del ejército era una de las razonas invocadas por los golpistas para derrocar el 22 de marzo al presidente Amadou Toumani Touré, al que acusaron de incompetente ante la rebelión en curso desde enero en el norte de Malí.
En otro comunicado leído en la televisión pública, el capitán Sanogo prometió que el ejército se está preparando "para regresar" a Kidal.
Por la mañana, el capitán Sanogo consideró que la situación era "crítica" en el norte de Malí a causa del avance de los rebeldes tuareg y de los islamistas, ante los cuales el ejército necesita "apoyo" exterior.
La ciudad de Kidal está ahora controlada por el grupo islamista Ansar Din, que aportó la mayor parte de las fuerzas en la batalla. Según testigos, también participaron en el ataque combatientes de Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) y los rebeldes tuareg del Movimiento Nacional de Liberación del Azawad.