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Política
Davis-a la izquierda-y Barnier
"Para ser honesto, estoy preocupado", expresó hoy el negociador europeo Michel Barnier ante lo que considera una falta de claridad de la posición británica.
Por su parte, el ministro británico del "Brexit", David Davis, les pidió el domingo a sus interlocutores europeos una mayor "flexibilidad" para poder lograr avances en el proceso, que según una serie de documentos dados a conocer por Londres en los últimos días debe abarcar tanto la salida del país del bloque como la relación que ambas partes mantendrán en el futuro.
Mientras para Reino Unido ambas cuestiones están ligadas entre sí, para la UE el proceso de negociaciones debe abordarse en distintas fases. Primero deben tratarse temas claves vinculados a la separación -como los derechos de los ciudadanos, las obligaciones financieras y la situación de la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte, entre otras cosas- para luego encarar la cuestión de la relación futura, considera Bruselas.
Al iniciar este lunes la nueva ronda de negociaciones, que se extenderá hasta el jueves, la Cámara de Comercio británica y la Cámara de Industria y Comercio alemana emitieron una declaración conjunta para pedir que el foco se pusiera en los intereses económicos conjuntos y en la creación de regulaciones de transición.
"Reino Unido y la UE deberían tratar regulaciones de transición, especialmente con respecto al tema de los aranceles, para que las empresas de ambos lados cuenten con seguridad para planear sus inversiones", dice el comunicado. "Las Cámaras de Comercio en Reino Unido y Alemania quieren la continuidad de las buenas relaciones comerciales hoy y en el futuro", agrega.
Reino Unido, miembro de la UE desde 1973, será el primer país en abandonar el bloque, después de que sus ciudadanos votaron a favor de la salida en un referéndum celebrado el año pasado.
Por su parte, el ministro británico del "Brexit", David Davis, les pidió el domingo a sus interlocutores europeos una mayor "flexibilidad" para poder lograr avances en el proceso, que según una serie de documentos dados a conocer por Londres en los últimos días debe abarcar tanto la salida del país del bloque como la relación que ambas partes mantendrán en el futuro.
Mientras para Reino Unido ambas cuestiones están ligadas entre sí, para la UE el proceso de negociaciones debe abordarse en distintas fases. Primero deben tratarse temas claves vinculados a la separación -como los derechos de los ciudadanos, las obligaciones financieras y la situación de la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte, entre otras cosas- para luego encarar la cuestión de la relación futura, considera Bruselas.
Al iniciar este lunes la nueva ronda de negociaciones, que se extenderá hasta el jueves, la Cámara de Comercio británica y la Cámara de Industria y Comercio alemana emitieron una declaración conjunta para pedir que el foco se pusiera en los intereses económicos conjuntos y en la creación de regulaciones de transición.
"Reino Unido y la UE deberían tratar regulaciones de transición, especialmente con respecto al tema de los aranceles, para que las empresas de ambos lados cuenten con seguridad para planear sus inversiones", dice el comunicado. "Las Cámaras de Comercio en Reino Unido y Alemania quieren la continuidad de las buenas relaciones comerciales hoy y en el futuro", agrega.
Reino Unido, miembro de la UE desde 1973, será el primer país en abandonar el bloque, después de que sus ciudadanos votaron a favor de la salida en un referéndum celebrado el año pasado.
