Reunión de parlamentarios con Asad provoca condenas y controversia en Francia


París, Francia. - Desde el presidente socialista François Hollande hasta su predecesor de derecha Nicolas Sarkozy, los principales líderes políticos franceses criticaron el jueves el viaje realizado a Damasco por cuatro parlamentarios, en momentos en que París rechaza todo contacto con el régimen sirio.



Asad con los parlamentarios franceses
Asad con los parlamentarios franceses

La reunión de tres de los parlamentarios con el presidente sirio Bashar al Asad, calificado de "dictador" por Hollande y de "carnicero" por el primer ministro Manuel Valls, es objeto de fuertes críticas, aunque hay quienes defienden la necesidad de un acercamiento para combatir al grupo Estado Islámico, convertido en "enemigo principal" en la región.

Desde Manila, donde se encuentra en visita oficial, Hollande "condenó" el jueves esa "iniciativa". "Se trata de un encuentro entre parlamentarios franceses que no tienen mandato más que de sí mismos con un dictador que está en el origen de una de las más graves guerras civiles de los últimos años, que ha causado 200.000 muertos ¡200.000!", dijo el presidente.

Manuel Valls calificó poco antes de "carnicero" a Asad y de "falta moral" esa reunión, sin precedentes desde la ruptura de relaciones diplomáticas entre los dos países, en mayo de 2012.

El expresidente Nicolas Sarkozy, líder del principal partido de la oposición de derechas, la UMP, calificó a los cuatro parlamentarios de "payasos", asegurando que él no habría viajado a Damasco.
 

Por su parte, la prensa siria se congratuló el jueves por ese acontecimiento "que marcará un hito", según el diario El Watan (cercano al régimen). "Esa delegación es un mensaje que invita a los gobiernos europeos a adoptar una política más valiente, anunciando un cambio de actitud hacia nuestro país".

El diario sostiene que "cientos de ediles y parlamentarios de Francia y de Europa" se "oponen a la política de sus gobiernos sobre la crisis siria".

 

- Intereses económicos -

 

Desde el comienzo de la guerra de Siria, Francia mantiene una línea dura respecto a Siria, exige el retiro de Asad y repite que él no puede formar parte de una solución política.

La política exterior de Francia, en particular su intervención en el Sahel y en Irak, así como su posición respecto a Siria, es en general objeto de un cierto consenso en el país y es criticada solamente por sectores minoritarios de la izquierda y de la derecha.

La delegación que viajó a Damasco estaba formada por los diputados Jacques Myard (UMP, derecha) y Gérard Bapt (socialista, que no asistió a la reunión con Asad) y los senadores Jean-Pierre Vial (UMP) y François Zocchetto (centrista).

A su regreso a París, el jueves, Jacques Myard condenó la "política ciega" del gobierno. "Si Bashar cae, será el caos en la región", con "la dislocación de Siria y del Líbano", sostuvo, alegando asimismo la necesidad de preservar los intereses económicos de Francia en su antiguo protectorado.

Gérard Bapt evocó, por su parte, "una visita estrictamente privada" y un viaje "exploratorio para recuperar las vías de la comprensión y de la paz".
 

El hecho es que el viaje de los parlamentarios reactivó el debate sobre la pertinencia o no de dialogar con el presidente sirio, y al respecto se levantan voces disonantes, en particular en la derecha.

"Estamos obligados a dialogar con Bashar al Asad desde el momento en que tenemos un enemigo prioritario, el Estado Islámico", estimó el diputado Henri Guaino, un allegado de Sarkozy.

El ex primer ministro François Fillon defendió también la iniciativa de los parlamentarios, afirmando que "tuvieron razón" ya que "hay que escuchar a todas las partes".

Jueves, 26 de Febrero 2015
AFP (Agencia France-Presse)
           


Nuevo comentario:

Noticias | Política | Ideas | Personalidades | Doctrinas | Cultura | Patrimonio cultural | Libros | Diálogo | Investigación | Literatura | Artes | Educación | Comunicación | Ciencia | Entretenimiento | Turismo | Sociedad | Deporte