
El funcionario señaló que los responsables estadounidenses creen que las fuerzas del gobierno están librando una guerra de ataque y respuesta contra las milicias de la oposición, durante la cual éstas últimas han sufrido grandes pérdidas. Las milicias han cambiado de táctica y han reemprendido sus ataques, lo que ha llevado al Ejército, a su vez, a intensificar sus operaciones.
“Nuestra evaluación en el tema militar es que las fuerzas gubernamentales siguen siendo relativamente consistentes y parece que después de un año y medio han aprendido las lecciones sobre cómo hacer frente a este tipo de insurrección”, dijo el funcionario de EEUU. Del mismo modo, señala, la capacidad combativa de los insurgentes se ha perfeccionado, lo que sugiere que el conflicto va a prolongarse.
“Los dos antagonistas se preparan para un largo conflicto. Vemos que el régimen cree que puede ganar al final o al menos eso parece y persiste en mantener el control, mientras que la oposición se está preparando para lo que parece ser una larga batalla”, añade.