Son los combates más mortíferos en Afganistán desde la primera vuelta de las elecciones presidenciales el 5 de abril.
El lunes por la noche, "casi 300 miembros de la red Haqani y de combatientes extranjeros, incluidos kamikazes, lanzaron ataques para apoderarse de una base de las fuerzas gubernamentales" en la provincia de Paktika, cerca de la frontera paquistaní, informaron los servicios secretos afganos (NDS) en un comunicado.
Las fuerzas afganas, con ayuda de la OTAN, lanzaron un "contraataque" que se saldó con la muerte de sesenta miembros de la red Haqani y de combatientes extranjeros, añadieron.
La red Haqani es un grupo islamista formado hace más de 30 años.
Contactado por la AFP, un responsable de esta facción talibán confirmó la muerte de 60 insurgentes en los combates. Fuentes de seguridad paquistaníes corroboraron el balance y añadieron que los rebeldes habían capturado a "12 soldados afganos".
El ministerio de Defensa afgano informó de cinco muertos en sus filas, pero no ha confirmado la captura de soldados.
Los rebeldes islamistas fueron expulsados del poder en 2001 por una coalición militar internacional encabezada por Estados Unidos y desde entonces intentan derrocar al gobierno.