"Los cuerpos de los siete egipcios fueron hallados en Jaluta, al este de Bengasi", indicó a la AFP Ibrahim al Shara, portavoz de los servicios de seguridad libios.
El portavoz del Ministerio egipcio de Relaciones Exteriores, Badr Abdel Ati, precisó a la AFP que los siete egipcios eran "todos cristianos".
El portavoz indicó no obstante que no podía afirmar que se tratara de un crimen confesional y se inclinó más por un litigio financiero como motivo de los asesinatos.
Según una fuente hospitalaria de Bengasi, las víctimas fueron ejecutadas de tiros en la cabeza y el pecho.
Decenas de miles de egipcios trabajan en Libia, principalmente, en la construcción y la artesanía.
Los egipcios de confesión cristiana, acusados de proselitismo, son a menudo víctimas de secuestros sobre todo en el este de Libia, feudo de islamistas extremistas.