"Hasta la fecha, el gobierno de Siria ha cooperado plenamente apoyando el trabajo del primer equipo y de la misión conjunta OPAQ-ONU", indicó en un comunicado Sigfrid Kaag, que se encuentra en Damasco.
Kaag también declaró que "al ratificar la Convención sobre las armas químicas, el gobierno sirio mostró su compromiso con la tarea" de destruir el arsenal químico del país.
Un equipo de inspectores llegó a principios de octubre a Siria para supervisar la aplicación de la resolución 2118 del Consejo de Seguridad, que ordena la destrucción del arsenal químico sirio de aquí a mediados de 2014.
"Los plazos son un desafío a superar", reconoció la coordinadora holandesa de la misión conjunta OPAQ-ONU. La resolución fue adoptada a raíz de un acuerdo ruso-estadounidense sobre el desmantelamiento del arsenal químico sirio.
Esto alejó la amenaza de una intervención norteamericana en el país en represalia a un ataque cometido con armas químicas el 21 de agosto del que los occidentales culpan al régimen de Bashar al Asad. Kaag también consideró que el equipo mantuvo "reuniones muy positivas al más alto nivel con el gobierno sirio".
"Hay una cooperación muy cercana, constante", declaró y describió la destrucción de las armas químicas como "un objetivo común". Nombrada el viernes por la ONU, Kaag llegó el lunes a Damasco y, a continuación, establecerá su base en Chipre.
Kaag también declaró que "al ratificar la Convención sobre las armas químicas, el gobierno sirio mostró su compromiso con la tarea" de destruir el arsenal químico del país.
Un equipo de inspectores llegó a principios de octubre a Siria para supervisar la aplicación de la resolución 2118 del Consejo de Seguridad, que ordena la destrucción del arsenal químico sirio de aquí a mediados de 2014.
"Los plazos son un desafío a superar", reconoció la coordinadora holandesa de la misión conjunta OPAQ-ONU. La resolución fue adoptada a raíz de un acuerdo ruso-estadounidense sobre el desmantelamiento del arsenal químico sirio.
Esto alejó la amenaza de una intervención norteamericana en el país en represalia a un ataque cometido con armas químicas el 21 de agosto del que los occidentales culpan al régimen de Bashar al Asad. Kaag también consideró que el equipo mantuvo "reuniones muy positivas al más alto nivel con el gobierno sirio".
"Hay una cooperación muy cercana, constante", declaró y describió la destrucción de las armas químicas como "un objetivo común". Nombrada el viernes por la ONU, Kaag llegó el lunes a Damasco y, a continuación, establecerá su base en Chipre.