GINEBRA, 29 noviembre 2009 (AFP) -
Sólo cuatro cantones de los 26 que componen la Confederación helvética rechazaron la propuesta apoyada por el partido de derecha populista UDC y la pequeña formación cristiana UDF.
La decisión de los suizos implica una modificación del artículo 72 de la Constitución suiza que regula las relaciones entre el Estado y las religiones.
La prohibición de construir minaretes figurará como una medida tendiente a "mantener la paz entre los miembros de las diversas comunidades religiosas".
El partido UDC, cuya prédica apunta a fomentar el miedo a los extranjeros, logró convencer a la mayoría de los suizos diciendo que los minaretes eran el "símbolo aparente de una reivindicación político-religiosa del poder, que cuestiona los derechos fundamentales".
Es un resultado "catastrófico" que expresa "un verdadero miedo, un cuestionamiento profundo del islam en Suiza", declaró el intelectual musulmán Tariq Ramadan, que vive en Ginebra y enseña en la universidad británica de Oxford.
El partido Verde suizo anunció el domingo que estudiaba la posibilidad de presentar un recurso ante la Corte Europea de Derechos Humanos con sede en Estrasburgo, Francia, por violación del principio de la libertad religiosa que figura en la Convención europea de los derechos humanos.
Sólo cuatro cantones de los 26 que componen la Confederación helvética rechazaron la propuesta apoyada por el partido de derecha populista UDC y la pequeña formación cristiana UDF.
La decisión de los suizos implica una modificación del artículo 72 de la Constitución suiza que regula las relaciones entre el Estado y las religiones.
La prohibición de construir minaretes figurará como una medida tendiente a "mantener la paz entre los miembros de las diversas comunidades religiosas".
El partido UDC, cuya prédica apunta a fomentar el miedo a los extranjeros, logró convencer a la mayoría de los suizos diciendo que los minaretes eran el "símbolo aparente de una reivindicación político-religiosa del poder, que cuestiona los derechos fundamentales".
Es un resultado "catastrófico" que expresa "un verdadero miedo, un cuestionamiento profundo del islam en Suiza", declaró el intelectual musulmán Tariq Ramadan, que vive en Ginebra y enseña en la universidad británica de Oxford.
El partido Verde suizo anunció el domingo que estudiaba la posibilidad de presentar un recurso ante la Corte Europea de Derechos Humanos con sede en Estrasburgo, Francia, por violación del principio de la libertad religiosa que figura en la Convención europea de los derechos humanos.