BRUSELAS, Anna Pelegrí, (AFP) - "Ahora vamos a Solvay", el edificio donde se reunían los jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea (UE), para "anunciar el acuerdo que ha sido concluido. Haremos declaraciones más tarde", declaró Van Rompuy a la prensa.
Minutos más tarde, el belga, que se estrenaba como anfitrión de las cumbres europeas, volvió a comparecer para precisar que Grecia no ha solicitado "ningún apoyo financiero" para sanear sus arcas públicas, dejando suponer que por ahora los 27 no desembolsarán una ayuda financiera.
Van Rompuy afirmó además que la Eurozona tomará en caso de necesidad medidas "determinadas y coordinadas" para preservar su "estabilidad" financiera y poner fin a los recientes ataques especulativos contra la moneda única, usada por 16 de los 27 países de la UE.
Los líderes europeos se esforzaron en enviar un mensaje tranquilizador, dejando claro que no dejarán sola a Grecia, cuyo déficit público se disparó en 2009 para llegar a un 12,7% de su Producto Interior Bruto (PIB), frente al tope del 3% permitido por Bruselas.
Los 27 "no dejarán caer" a Grecia, prometió la canciller alemana, Angela Merkel, advirtiendo empero que las autoridades griegas deberán respetar las "reglas" comunitarias sobre los déficits.
Van Rompuy exhortó a Grecia a hacer todo lo posible, e incluso a adoptar medidas "suplementarias" para reducir su déficit de cuatro puntos porcentuales en 2010.
Van Rompuy y Merkel habían mantenido junto al presidente francés, Nicolas Sarkozy, y el primer ministro griego, Georges Papandreou, una reunión en pequeño comité previa al inicio de la cumbre, en la que también participaron el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, y el de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.
De concretarse un plan de rescate para Grecia, se trataría del primero que la Eurozona elabora desde su creación hace once años para acudir en ayuda de uno de sus socios.
Aunque el peso económico de Grecia en la zona euro es relativo, los mercados ven con preocupación la situación de otros países como España y Portugal, cuyos déficits también se dispararon con los masivos planes de rescate para frenar la crisis económica, y temen el contagio.
Los líderes de la Unión Europea anunciarán en la jornada el contenido del acuerdo, aunque las diferentes fuentes consultadas afirman que se tratará fundamentalmente de un mensaje de apoyo político, a la espera de definir medidas concretas en los próximos días.
"La idea es que haya un mensaje muy claro y muy político" al término de la cumbre, explicaron fuentes de la presidencia semestral española, indicando empero que los líderes "seguramente también entrarán en detalles".
"Todo se va a cerrar entre hoy (jueves) y el martes", cuando se reúnan los ministros de Finanzas de la UE en Bruselas, agregaron las fuentes.
Atenas ya ha prometido una batería de medidas para reducir el agujero de sus finanzas públicas, como la congelación de los sueldos de sus funcionarios, el recorte de los gastos sanitarios o el aumento de los impuestos sobre los carburantes.
Por parte europea, la ayuda podría llegar en forma de una línea de crédito para ser utilizada en caso de necesidad o a través de préstamos bilaterales de los Estados de la Eurozona a Grecia, según fuentes diplomáticas europeas.
Esta última idea sería defendida por París y Berlín, mientras los dirigentes socialistas europeos, entre éstos el presidente de turno de la UE y jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, la rechazaron el miércoles, reclamando un apoyo solidario en bloque.
Zapatero "ha venido diciendo en los últimos días que no se puede dejar caer a ningún país de la Eurozona", apelando al principio de "solidaridad", dijeron las fuentes de la presidencia española.
España, que este jueves recibió la confirmación de que siguió en recesión en el cuarto trimestre de 2009, se enfrenta también a un déficit explosivo del 11,2% del PIB, aunque por ahora se ha descartado que pueda necesitar un rescate de Europa.
Minutos más tarde, el belga, que se estrenaba como anfitrión de las cumbres europeas, volvió a comparecer para precisar que Grecia no ha solicitado "ningún apoyo financiero" para sanear sus arcas públicas, dejando suponer que por ahora los 27 no desembolsarán una ayuda financiera.
Van Rompuy afirmó además que la Eurozona tomará en caso de necesidad medidas "determinadas y coordinadas" para preservar su "estabilidad" financiera y poner fin a los recientes ataques especulativos contra la moneda única, usada por 16 de los 27 países de la UE.
Los líderes europeos se esforzaron en enviar un mensaje tranquilizador, dejando claro que no dejarán sola a Grecia, cuyo déficit público se disparó en 2009 para llegar a un 12,7% de su Producto Interior Bruto (PIB), frente al tope del 3% permitido por Bruselas.
Los 27 "no dejarán caer" a Grecia, prometió la canciller alemana, Angela Merkel, advirtiendo empero que las autoridades griegas deberán respetar las "reglas" comunitarias sobre los déficits.
Van Rompuy exhortó a Grecia a hacer todo lo posible, e incluso a adoptar medidas "suplementarias" para reducir su déficit de cuatro puntos porcentuales en 2010.
Van Rompuy y Merkel habían mantenido junto al presidente francés, Nicolas Sarkozy, y el primer ministro griego, Georges Papandreou, una reunión en pequeño comité previa al inicio de la cumbre, en la que también participaron el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, y el de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.
De concretarse un plan de rescate para Grecia, se trataría del primero que la Eurozona elabora desde su creación hace once años para acudir en ayuda de uno de sus socios.
Aunque el peso económico de Grecia en la zona euro es relativo, los mercados ven con preocupación la situación de otros países como España y Portugal, cuyos déficits también se dispararon con los masivos planes de rescate para frenar la crisis económica, y temen el contagio.
Los líderes de la Unión Europea anunciarán en la jornada el contenido del acuerdo, aunque las diferentes fuentes consultadas afirman que se tratará fundamentalmente de un mensaje de apoyo político, a la espera de definir medidas concretas en los próximos días.
"La idea es que haya un mensaje muy claro y muy político" al término de la cumbre, explicaron fuentes de la presidencia semestral española, indicando empero que los líderes "seguramente también entrarán en detalles".
"Todo se va a cerrar entre hoy (jueves) y el martes", cuando se reúnan los ministros de Finanzas de la UE en Bruselas, agregaron las fuentes.
Atenas ya ha prometido una batería de medidas para reducir el agujero de sus finanzas públicas, como la congelación de los sueldos de sus funcionarios, el recorte de los gastos sanitarios o el aumento de los impuestos sobre los carburantes.
Por parte europea, la ayuda podría llegar en forma de una línea de crédito para ser utilizada en caso de necesidad o a través de préstamos bilaterales de los Estados de la Eurozona a Grecia, según fuentes diplomáticas europeas.
Esta última idea sería defendida por París y Berlín, mientras los dirigentes socialistas europeos, entre éstos el presidente de turno de la UE y jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, la rechazaron el miércoles, reclamando un apoyo solidario en bloque.
Zapatero "ha venido diciendo en los últimos días que no se puede dejar caer a ningún país de la Eurozona", apelando al principio de "solidaridad", dijeron las fuentes de la presidencia española.
España, que este jueves recibió la confirmación de que siguió en recesión en el cuarto trimestre de 2009, se enfrenta también a un déficit explosivo del 11,2% del PIB, aunque por ahora se ha descartado que pueda necesitar un rescate de Europa.