Victoria socialdemócrata e histórico avance de la extrema derecha en las legislativas de Suecia


ESTOCOLMO. - La oposición socialdemócrata ganó este domingo las elecciones legislativas en Suecia, en las que la extrema derecha logró un histórico avance y podría complicar los proyectos del nuevo primer ministro.



Stefan Löfven, a la izquierda, y Fredrik Renfeldt
Stefan Löfven, a la izquierda, y Fredrik Renfeldt

Según las proyecciones de la televisión pública SVT tras el recuento del 57% de los votos, los socialdemócratas ganan las elecciones con el 31,2% de los sufragios.

Con este resultado, su líder, Stefan Lofven, de 57 años, que fue obrero y sindicalista, sería llamado para formar gobierno.

Sin embargo la suma de votos de los socialdemócratas, los Verdes y del Partido de Izquierda sería del 43,7%, inferior a la mayoría absoluta, aunque superarían la coalición de centro-derecha en el poder (39,1% de los votos).

Los socialdemócratas tendrán sobre todo que hacer frente al histórico avance de los Demócratas de Suecia (SD), un partido de extrema derecha que se convertirá en la tercera fuerza del país con cerca del 13,0% de los votos frente a los 5,7% que obtuvo hace cuatro años, según las primeras proyecciones.

"Ahora nosotros lo decidiremos todo", dijo desafiante Jimmie Åkesson, de 35 años, el líder de este partido anti-inmigración que hasta ahora era marginal.

"Lo que estamos viviendo es la implantación de los Demócratas de Suecia en el paisaje político", lamentó por su parte el ministro de Exteriores Carl Bildt en declaraciones a la agencia de prensa TT.

El avance de este partido es parecido al de otras formaciones de extrema derecha en Europa, como el Ukip en Gran Bretaña, el Frente Nacional en Francia o el Partido Popular en Dinamarca.

 

- Desgaste de las reformas liberales -

 

Estas elecciones marcan el final del reino del primer ministro Fredrik Reinfeldt, de 49 años, que ocupa el puesto desde hace ocho años y que a pesar de su buen balance económico paga el desgaste de sus reformas de corte liberal.

Si finalmente Stefan Lofven se convierte en primer ministro podrá aprovechar la buena salud de la economía sueca y de las finanzas públicas pero la formación de un gobierno con los Verdes y el Partido de Izquierda podrían complicarse por cuestiones sensibles como la energía nuclear o la defensa.

El otro desafío de Lofven será la política migratoria que atrae cada años 80.000 refugiados a Suecia, un país de 9,7 millones de habitantes, y alienta el crecimiento de la extrema derecha.

Los votantes del SD son suecos que se sienten abandonados por los partidos tradicionales y rechazan el consenso que ha habido hasta ahora sobre la inmigración.

"Básicamente son votantes de las clases populares, de todas las edades, dos terceras partes de ellos son hombres", explica el politólogo Anders Sannerstedt. "No son marginales sino suecos ordinarios", asegura.

El SD es partidario de aumentar la protección social a los más desfavorecidos pero al mismo tiempo es conservador en cuestiones sociales.

Según las previsiones de la televisión pública, el partido de extrema izquierda Iniciativa Feminista obtendría 3,2% de los votos, menos del 4% necesario para entrar en el parlamento.

Domingo, 14 de Septiembre 2014
AFP (Agencia France-Presse)
           


Nuevo comentario:

Noticias | Política | Ideas | Personalidades | Doctrinas | Cultura | Patrimonio cultural | Libros | Diálogo | Investigación | Literatura | Artes | Educación | Comunicación | Ciencia | Entretenimiento | Turismo | Sociedad | Deporte