JARKIV, Ania Tsoukanova, (AFP) - El presidente ruso, Dimitri Medvedev, viajó a Jarkiv, en el este de Ucrania, para reunirse con su homólogo Viktor Yanukovich, en la primera visita de un jefe de Estado ruso a esta ex república soviética desde 2006.
Los dos hombres firmaron un acuerdo en virtud del cual se prolonga la presencia de la flota rusa en el mar Negro de Ucrania, que expiraba en 2017.
"Hemos firmado un acuerdo según el cual la presencia de la base rusa se prolonga 25 años", con opción a cinco años adicionales, declaró Medvedev en rueda de prensa. Pero no precisó si esta extensión entraba en vigor a partir de ahora o de 2017.
"Se trata de un avance que esperábamos desde hace tiempo", subrayó.
La flota rusa del mar Negro, basada en Sebastopol tras un acuerdo firmado por Rusia y Ucrania en 1997 por 20 años, provocaba tensiones de forma recurrente entre Kiev y Moscú.
El anterior mandatario ucraniano, Viktor Yushenko, abogaba frecuentemente por la retirada de la flota rusa tras la expiración del acuerdo y la adhesión de Ucrania a la OTAN. Pero el actual presidente, Viktor Yanukovich, considerado prorruso, había dado a entender que la presencia de la base rusa podría prolongarse más allá de 2017.
El presidente ruso anunció un fuerte descuento sobre el precio de gas ruso a Ucrania.
"Nuestros socios ucranianos van a obtener un descuento sobre el precio del gas que accederá a 100 dólares si el precio es de 330 dólares (los 1.000 metros cúbicos, ndlr), si el precio es inferior, corresponderá al 30% del precio", declaró Medvedev.
El gas es un asunto extremadamente sensible entre Kiev y Moscú, que se opusieron a principios de 2009 en un conflicto que llevó, en pleno invierno, a una larga interrupción del suministro hacia clientes europeos.
"El descuento (del precio del gas) será considerado como parte del alquiler de nuestra base militar en Sebastopol", precisó.
Yanukovich, para quien la reducción de la tarifa del gas era crucial, celebró un acuerdo "sin precedentes". El nuevo jefe de Estado ucraniano, cuya base electoral se encuentra en el este industrial del país, gran consumidor de gas, prometió en efecto durante su campaña electoral renegociar el acuerdo de gas de 10 años firmado el año pasado con Moscú.
Además, el precio del gas es también importante para las conversaciones entre Kiev y el Fondo Monetario Internacional (FMI) cuya ayuda financiera es vital para esta ex república soviética.
Para que el FMI desbloquee los fondos, el gobierno ucranio prometió limitar su déficit presupuestario en 2010 al 6% del Producto Interior Bruto, objetivo muy difícil de lograr según Kiev si el precio del gas no baja.
"Hoy hemos abierto una nueva página en las relaciones entre Ucrania y Rusia", se felicitó el presidente ucraniano.
Yanukovich, que asumió el cargo en febrero, se ha comprometido con mejorar las relaciones con Moscú y ha multiplicado los contactos con Medvedev, con el que se reunía el miércoles por quinta vez en menos de dos meses.
Los dos hombres firmaron un acuerdo en virtud del cual se prolonga la presencia de la flota rusa en el mar Negro de Ucrania, que expiraba en 2017.
"Hemos firmado un acuerdo según el cual la presencia de la base rusa se prolonga 25 años", con opción a cinco años adicionales, declaró Medvedev en rueda de prensa. Pero no precisó si esta extensión entraba en vigor a partir de ahora o de 2017.
"Se trata de un avance que esperábamos desde hace tiempo", subrayó.
La flota rusa del mar Negro, basada en Sebastopol tras un acuerdo firmado por Rusia y Ucrania en 1997 por 20 años, provocaba tensiones de forma recurrente entre Kiev y Moscú.
El anterior mandatario ucraniano, Viktor Yushenko, abogaba frecuentemente por la retirada de la flota rusa tras la expiración del acuerdo y la adhesión de Ucrania a la OTAN. Pero el actual presidente, Viktor Yanukovich, considerado prorruso, había dado a entender que la presencia de la base rusa podría prolongarse más allá de 2017.
El presidente ruso anunció un fuerte descuento sobre el precio de gas ruso a Ucrania.
"Nuestros socios ucranianos van a obtener un descuento sobre el precio del gas que accederá a 100 dólares si el precio es de 330 dólares (los 1.000 metros cúbicos, ndlr), si el precio es inferior, corresponderá al 30% del precio", declaró Medvedev.
El gas es un asunto extremadamente sensible entre Kiev y Moscú, que se opusieron a principios de 2009 en un conflicto que llevó, en pleno invierno, a una larga interrupción del suministro hacia clientes europeos.
"El descuento (del precio del gas) será considerado como parte del alquiler de nuestra base militar en Sebastopol", precisó.
Yanukovich, para quien la reducción de la tarifa del gas era crucial, celebró un acuerdo "sin precedentes". El nuevo jefe de Estado ucraniano, cuya base electoral se encuentra en el este industrial del país, gran consumidor de gas, prometió en efecto durante su campaña electoral renegociar el acuerdo de gas de 10 años firmado el año pasado con Moscú.
Además, el precio del gas es también importante para las conversaciones entre Kiev y el Fondo Monetario Internacional (FMI) cuya ayuda financiera es vital para esta ex república soviética.
Para que el FMI desbloquee los fondos, el gobierno ucranio prometió limitar su déficit presupuestario en 2010 al 6% del Producto Interior Bruto, objetivo muy difícil de lograr según Kiev si el precio del gas no baja.
"Hoy hemos abierto una nueva página en las relaciones entre Ucrania y Rusia", se felicitó el presidente ucraniano.
Yanukovich, que asumió el cargo en febrero, se ha comprometido con mejorar las relaciones con Moscú y ha multiplicado los contactos con Medvedev, con el que se reunía el miércoles por quinta vez en menos de dos meses.