El martes más de 1.000 combatientes talibán capturaron amplias zonas de la capital de la provincia, también llamada Farah, durante una batalla de 22 horas con las fuerzas de seguridad en la que murieron al menos 35 soldados y unos 300 talibanes, según las informaciones oficiales.
La plaza central de Farah estuvo bajo control talibán hasta que intervinieron fuerzas especiales apoyadas por la Fuerza Aérea estadounidense.
El avance talibán fue un duro golpe para el Gobierno afgano y las fuerzas de seguridad, ya que hasta ahora los talibanes sólo habían conseguido capturar una capital provincial: Kunduz, en el norte del país, a finales de 2015.
La plaza central de Farah estuvo bajo control talibán hasta que intervinieron fuerzas especiales apoyadas por la Fuerza Aérea estadounidense.
El avance talibán fue un duro golpe para el Gobierno afgano y las fuerzas de seguridad, ya que hasta ahora los talibanes sólo habían conseguido capturar una capital provincial: Kunduz, en el norte del país, a finales de 2015.