"Quince policías y 17 civiles resultaron heridos en un atentado suicida", declaró a los periodistas el gobernador de Estambul Huseyin Avni Mutlu. El kamikaze murió por el artefacto que hizo detonar, pero llevaba consigo otros explosivos.
Un balance anterior, difundido por el jefe de la policía de Estambul, Huseyin Capkin, dio cuenta de 22 heridos, de los cuales 10 policías y 12 civiles.
El ministro del Interior, Besir Atalay, estimó que era demasiado pronto para decir quién está detrás del atentado.
Pero este domingo estaba previsto que expirara el alto el fuego unilateral decretado por los rebeldes kurdos. Este atentado también coincide con las celebraciones por el aniversario de la república de Turquía, el 29 de octubre. De ahí que las sospechas recaigan sobre el PKK, el Partido de los Trabajadores del Kurdistán.
Según Capkin, el asaltante intentó subir a un autocar atestado de policías y hacerse saltar por los aires en su interior, para causar el mayor número posible de daños.
Pero, al parecer, el artefacto estalló antes, lo que evitó una carninería.
Según testimonios recabados por la AFP y una cinta de vídeo difundida por la cadena CNN-Türk, tras la explosión se escucharon disparos.
El atentado se produjo sobre las 08H30 GMT en la explanada de la Plaza de Taksim, en la orilla europea de la ciudad, vigilada por policías antidisturbios las 24 horas.
La policía acordonó la explanada y las calles aledañas.
En Mardin, una ciudad del sudeste anatolio poblada mayoritariamente por kurdos, el primer ministro Recep Tayyip Erdogan denunció un atentado "terrorista".
"No toleraremos a nadie que perturbe la tranquilidad, la estabilidad y la seguridad de Turquía", dijo, citado por la agencia Anatolia.
Este ataque se produce en un momento en que el gobierno islamista moderado turco lanzó una nueva iniciativa para resolver el litigio kurdo.
Según parece, las autoridades hicieron partícipe de ella al dirigente del PKK, Abdulá Öcalan, que purga cadena perpetua, a través de sus abogados que ejercen de intermediarios.
En el pasado, miembros del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y grupos de extrema izquierda cometieron atentados con bomba en Estambul, ciudad de más de 12 millones de habitantes.
Expertos citados por los canales de televisión apuntaron al PKK como autor del atentado, ya que la tregua decretada a mediados de agosto contra las fuerzas de Ankara debe concluir este domingo.
Sin embargo, el jefe militar del PKK, Murat Karayilan, aseguró el jueves en una entrevista al diario Radikal que su movimiento, en lucha contra Ankara desde 1984, no atentaría contra civiles y que estaba dispuesto a prolongar la tregua si el gobierno turco aceptaba dialogar.
Según la agencia turca Anatolia, se trata del tercer atentado suicida cometido contra las fuerzas del orden en el mismo barrio de Estambul desde 1999.
El pasado 22 de junio, una bomba explotó al paso de un autocar militar en otro barrio de Estambul, matando a cinco soldados y a la hija de uno de ellos.
Este atentado fue reivindicado por el grupo radical kurdo "Los Halcones de la Libertad del Kurdistán" (TAK) considerado por Ankara como un nombre de prestado utilizado por el PKK cuando comete actos susceptibles de chocar a la opinión pública.
Un balance anterior, difundido por el jefe de la policía de Estambul, Huseyin Capkin, dio cuenta de 22 heridos, de los cuales 10 policías y 12 civiles.
El ministro del Interior, Besir Atalay, estimó que era demasiado pronto para decir quién está detrás del atentado.
Pero este domingo estaba previsto que expirara el alto el fuego unilateral decretado por los rebeldes kurdos. Este atentado también coincide con las celebraciones por el aniversario de la república de Turquía, el 29 de octubre. De ahí que las sospechas recaigan sobre el PKK, el Partido de los Trabajadores del Kurdistán.
Según Capkin, el asaltante intentó subir a un autocar atestado de policías y hacerse saltar por los aires en su interior, para causar el mayor número posible de daños.
Pero, al parecer, el artefacto estalló antes, lo que evitó una carninería.
Según testimonios recabados por la AFP y una cinta de vídeo difundida por la cadena CNN-Türk, tras la explosión se escucharon disparos.
El atentado se produjo sobre las 08H30 GMT en la explanada de la Plaza de Taksim, en la orilla europea de la ciudad, vigilada por policías antidisturbios las 24 horas.
La policía acordonó la explanada y las calles aledañas.
En Mardin, una ciudad del sudeste anatolio poblada mayoritariamente por kurdos, el primer ministro Recep Tayyip Erdogan denunció un atentado "terrorista".
"No toleraremos a nadie que perturbe la tranquilidad, la estabilidad y la seguridad de Turquía", dijo, citado por la agencia Anatolia.
Este ataque se produce en un momento en que el gobierno islamista moderado turco lanzó una nueva iniciativa para resolver el litigio kurdo.
Según parece, las autoridades hicieron partícipe de ella al dirigente del PKK, Abdulá Öcalan, que purga cadena perpetua, a través de sus abogados que ejercen de intermediarios.
En el pasado, miembros del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y grupos de extrema izquierda cometieron atentados con bomba en Estambul, ciudad de más de 12 millones de habitantes.
Expertos citados por los canales de televisión apuntaron al PKK como autor del atentado, ya que la tregua decretada a mediados de agosto contra las fuerzas de Ankara debe concluir este domingo.
Sin embargo, el jefe militar del PKK, Murat Karayilan, aseguró el jueves en una entrevista al diario Radikal que su movimiento, en lucha contra Ankara desde 1984, no atentaría contra civiles y que estaba dispuesto a prolongar la tregua si el gobierno turco aceptaba dialogar.
Según la agencia turca Anatolia, se trata del tercer atentado suicida cometido contra las fuerzas del orden en el mismo barrio de Estambul desde 1999.
El pasado 22 de junio, una bomba explotó al paso de un autocar militar en otro barrio de Estambul, matando a cinco soldados y a la hija de uno de ellos.
Este atentado fue reivindicado por el grupo radical kurdo "Los Halcones de la Libertad del Kurdistán" (TAK) considerado por Ankara como un nombre de prestado utilizado por el PKK cuando comete actos susceptibles de chocar a la opinión pública.