Los muertos en la explosión del coche bomba podrían ser más, ya que hay numerosos heridos graves, precisó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Gran Bretaña.
En el norte de Siria, helicópteros de las fuerzas del régimen de Bashar al Asad lanzaron barriles de explosivos sobre el casco viejo de Alepo, agregó el OSDH.
Al norte de Alepo, los yihadistas del Estado Islámico, que controlan parte de los territorios de Irak y Siria, siguieron avanzando en este último país, al conquistar el pueblo de Baghaydin, cerca de la frontera con Turquía.
El miércoles, el EI había conquistado ocho pueblos entre Alepo y la frontera, tras combates contra los rebeldes que los controlaban.
Estas victorias permiten al EI abrirse camino hacia las localidades estratégicas de Aazaz y Marea, un bastión del Frente Islámico, una coalición de grupos islamistas que combaten contra el EI.
Para Charles Lister, del centro Brooking de Doha, si el EI logra apoderarse de Aazaz, cortará la vía de abastecimiento de los rebeldes a partir de Turquía y si logra apoderarse de Marea, podrá lanzar ataques contra Alepo, dividida entre fuerzas del régimen y rebeldes.
Los rebeldes están cercados por el avance del ejército en los suburbios de Alepo y el de EI en el norte, estimó Lister, en el portal internet de CNN.
Desde el inicio de la revuelta contra el régimen de Asad, en marzo de 2011, que derivó en un complejo y devastador conflicto, la violencia ha dejado más de 170.000 muertos y ha obligado a la mitad de los habitantes de Siria a huir de sus hogares.