
El portavoz talibán, Zabiullah Mujahid, reivindicó el ataque en un mensaje de texto enviado a la AFP.
El ataque fue lanzado, según él, por "gran número de fedayines" (suicidas) y dejó "muchas víctimas". Su objetivo: "un centro de formación estadounidense, un centro de la policía y otros centros militares", indicó.
Interrogada por la AFP, la ISAF, la fuerza militar de la OTAN en Afganistán, integrada sobre todo por tropas estadounidenses, dijo que las tropas de la coalición "no estuvieron en absoluto implicadas" y que por lo tanto no habían sufrido "ninguna baja".
Tampoco "hay víctimas civiles", señaló Sediq Sediqqi, portavoz del Ministerio del Interior, via twitter.
El ataque, lanzado poco antes de las 06H00 locales (02H30 GMT) cerca de un edificio de la policía de trárfico y del local de la policía de fronteras, en la ruta que lleva al parlamento, al parecer aún no ha terminado.
Inicialmente estalló un coche bomba, según el general Mohammad Ayub Salangi, jefe de la policía de Kabul.
Luego, "un grupo de terroristas, dos, tres o cuatro, trataron de entrar en el edificio de la policía de tráfico", indicó Mohammad Zahir, el jefe de la policía criminal.
"Dos de ellos murieron. Uno de ellos, que logró entrar en el edificio, dispara de forma esporádica. Nuestras fuerzas de seguridad están en el lugar", dijo.
Según otra importante fuente de seguridad, "la mayor parte del edificio, incluyendo el techo, está de nuevo bajo control" de las fuerzas de seguridad afganas. "Sólo unas cuantas piezas faltan" y "se lanza granadas", dijo, agregando que el edificio será "pronto limpiado".
Las "unidades especiales" de la policía están trabajando, precisó el general Salangi, que indicó que "probablemente dos" atacantes seguían luchando.
La explosión inicial fue "muy, muy grande, enorme", dijo un testigo a la AFP. "Hay camiones de bomberos, ambulancias y policías por todas partes", agregó.
Una fuente de seguridad occidental confirmó el ataque y dijo que dos atacantes suicidas lograron su cometido y que un tercero estaba en fuga, sin mencionar sin embargo el coche-bomba.
El ataque se produce cinco días después de que un grupo de seis atacantes suicidas talibanes irrumpieran en un complejo del servicio secreto afgano (NDS), en el centro de Kabul, matando a un guardia antes de ser abatidos. En total, 33 civiles resultaron heridos.
Los ataques suicidas son el arma principal utilizada por los rebeldes afganos para golpear a sus enemigos del gobierno de Kabul y sus aliados occidentales.
El ataque fue lanzado, según él, por "gran número de fedayines" (suicidas) y dejó "muchas víctimas". Su objetivo: "un centro de formación estadounidense, un centro de la policía y otros centros militares", indicó.
Interrogada por la AFP, la ISAF, la fuerza militar de la OTAN en Afganistán, integrada sobre todo por tropas estadounidenses, dijo que las tropas de la coalición "no estuvieron en absoluto implicadas" y que por lo tanto no habían sufrido "ninguna baja".
Tampoco "hay víctimas civiles", señaló Sediq Sediqqi, portavoz del Ministerio del Interior, via twitter.
El ataque, lanzado poco antes de las 06H00 locales (02H30 GMT) cerca de un edificio de la policía de trárfico y del local de la policía de fronteras, en la ruta que lleva al parlamento, al parecer aún no ha terminado.
Inicialmente estalló un coche bomba, según el general Mohammad Ayub Salangi, jefe de la policía de Kabul.
Luego, "un grupo de terroristas, dos, tres o cuatro, trataron de entrar en el edificio de la policía de tráfico", indicó Mohammad Zahir, el jefe de la policía criminal.
"Dos de ellos murieron. Uno de ellos, que logró entrar en el edificio, dispara de forma esporádica. Nuestras fuerzas de seguridad están en el lugar", dijo.
Según otra importante fuente de seguridad, "la mayor parte del edificio, incluyendo el techo, está de nuevo bajo control" de las fuerzas de seguridad afganas. "Sólo unas cuantas piezas faltan" y "se lanza granadas", dijo, agregando que el edificio será "pronto limpiado".
Las "unidades especiales" de la policía están trabajando, precisó el general Salangi, que indicó que "probablemente dos" atacantes seguían luchando.
La explosión inicial fue "muy, muy grande, enorme", dijo un testigo a la AFP. "Hay camiones de bomberos, ambulancias y policías por todas partes", agregó.
Una fuente de seguridad occidental confirmó el ataque y dijo que dos atacantes suicidas lograron su cometido y que un tercero estaba en fuga, sin mencionar sin embargo el coche-bomba.
El ataque se produce cinco días después de que un grupo de seis atacantes suicidas talibanes irrumpieran en un complejo del servicio secreto afgano (NDS), en el centro de Kabul, matando a un guardia antes de ser abatidos. En total, 33 civiles resultaron heridos.
Los ataques suicidas son el arma principal utilizada por los rebeldes afganos para golpear a sus enemigos del gobierno de Kabul y sus aliados occidentales.