En entrevista concedida al diario colombiano El Tiempo, Carter sostuvo que es legítimo el permanente reclamo de Chávez hacia el ahora también ex presidente de Estados Unidos, George W. Bush, al señalar que esa administración, al menos, tenía pleno conocimiento de los planes golpistas en Venezuela.
"Creo que no hay duda alguna de que en el 2002, Estados Unidos tenía al menos pleno conocimiento o pudo estar directamente involucrado en el golpe. De tal manera que él (Chávez) tiene un reclamo legítimo contra Estados Unidos", dijo Carter, nombrado Premio Nobel de la Paz en 2002.
Aseguró que, gracias a la participación el organismo que encabeza, el Centro Carter, en procesos electorales realizados en Venezuela, pudo notar que los resultados comiciales que han mantenido a Chávez al frente de la presidencia del país han reflejado la voluntad popular.
"El Centro Carter ha estado involucrado en cuatro o cinco elecciones, algunas de las cuales han sido muy complicadas. Diría que cada resultado electoral ha sido básicamente compatible con la voluntad del pueblo. Así lo he visto de manera casi consistente en el pasado", detalló.
"Chávez ha salido adelante en una elección honesta con casi 60 ó 62 por ciento de los votos", añadió Carter.
El 11 de abril de 2002 se llevó a cabo un golpe de Estado contra el presidente venezolano, Hugo Chávez, que le apartó del poder por sólo 48 horas. Su regreso fue consecuencia de la reacción popular en las calles que rechazó el gobierno de facto instalado en ese país, además de la acción de militares leales dentro de la Fuerza Armada de Venezuela.
Durante la gestión de Bush en Estados Unidos, esa nación norteamericana nunca condenó el golpe de Estado contra Chávez, pese al carácter democrático de su Gobierno en Venezuela.
Uribe falló en tema de bases
Además, Carter aseguró que el presidente colombiano, Álvaro Uribe, falló al no explicar ante la región los detalles del convenio militar que su país firmó con Estados Unidos, que permitirá la instalación en Colombia de hasta siete bases militares estadounidenses.
En ese sentido, consideró que al gobierno colombiano le habría ido mucho mejor si hubiera dado las explicaciones antes del anuncio del acuerdo, que ha sido rechazados por gobiernos de Suramérica ante la posibilidad de que ese acuerdo signifique una amenaza estadounidense para la región.
Carter, quien fue presidente entre 1977 y 1981, aseguró que "habría sido natural suponer que, a causa de la larga historia de intervenciones de Estados Unidos en la región, éste sería un tema muy sensible".
"En los países caribeños, en Nicaragua y en otros sitios en el pasado, los líderes estadounidenses enviaron a los marines para defender a dictaduras que habrían sido derrocadas por el público. Por eso la intervención ha tenido un mal nombre y creo que el presidente Uribe se dio cuenta un poco tarde de eso", señaló.