DUBAI, 18 diciembre 2009 (AFP) -
"Se han contabilizado 62 muertos", de los cuales 47 eran mujeres y niños, añadió, denunciando "una matanza, que es un crimen de guerra y un crimen contra la humanidad".
El jueves, el ministerio de Defensa yemení anunció que las fuerzas de seguridad habían matado a por lo menos 28 miembros de Al Qaida y capturado a otros 17, en operaciones simultáneas que permitieron desbaratar atentados suicidas contra intereses extranjeros.
La ofensiva más importante tuvo como objetivo un campo de entrenamiento de Al Qaida en la región de Abyan (480 km al sudeste de Saná). Según responsables locales, los bombardeos aéreos alcanzaron "por error" una aldea vecina, causando un número indeterminado de muertos entre la población civil.
La región de Abyan, que forma parte del antiguo Yemen del Sur, se ha convertido en los últimos años en una zona de reagrupamiento de combatientes islamistas, entre los que hay veteranos de Afganistán, que escapan al control de las fuerzas de seguridad.
Ali Salem al Baid, principal figura del movimiento separatista sudista, desmintió en el comunicado del viernes que Al Qaida esté asentada en el sur de Yemen.
"Las acusaciones del régimen de que Al Qaida está presente en el Sur son totalmente falsas", afirmó.
"Se han contabilizado 62 muertos", de los cuales 47 eran mujeres y niños, añadió, denunciando "una matanza, que es un crimen de guerra y un crimen contra la humanidad".
El jueves, el ministerio de Defensa yemení anunció que las fuerzas de seguridad habían matado a por lo menos 28 miembros de Al Qaida y capturado a otros 17, en operaciones simultáneas que permitieron desbaratar atentados suicidas contra intereses extranjeros.
La ofensiva más importante tuvo como objetivo un campo de entrenamiento de Al Qaida en la región de Abyan (480 km al sudeste de Saná). Según responsables locales, los bombardeos aéreos alcanzaron "por error" una aldea vecina, causando un número indeterminado de muertos entre la población civil.
La región de Abyan, que forma parte del antiguo Yemen del Sur, se ha convertido en los últimos años en una zona de reagrupamiento de combatientes islamistas, entre los que hay veteranos de Afganistán, que escapan al control de las fuerzas de seguridad.
Ali Salem al Baid, principal figura del movimiento separatista sudista, desmintió en el comunicado del viernes que Al Qaida esté asentada en el sur de Yemen.
"Las acusaciones del régimen de que Al Qaida está presente en el Sur son totalmente falsas", afirmó.