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Política
Un avión ruso fotografiado desde un avión estadounidense.
Al cierre de un encuentro de ministros de la OTAN este miércoles, Tillerson dijo que su país no aceptará encuentros más regulares de representantes de la OTAN y Rusia.
"Apoyamos las conversaciones cuando hay un objetivo", dijo Tillerson, quien añadió que una normalización del diálogo y encuentros regulares con Rusia sólo serían posibles si hay avances en la solución del conflicto con Ucrania. El funcionario aclaró que no habrá reuniones solo para hablar.
Tillerson representa así una posición distinta a Alemania, que promueve desde hace tiempo un diálogo más intenso con Rusia en la OTAN. El ministro del Exterior alemán, Sigmar Gabriel, había pedido este martes durante el encuentro "seguir en conversaciones con Rusia" a pesar de las políticas rusas que generan inseguridad en la alianza atlántica.
Además de las conversaciones a nivel militar, el debate de la OTAN gira en torno sobre todo del Consejo OTAN-Rusia. Este es considerado el foro más importante para conversaciones políticas entre la OTAN y Rusia. Fue fundado en 2002 para involucrar más estrechamente a Rusia en la alianza transatlántica y generar confianza entre los antiguos enemigos.
El Consejo debe sesionar a nivel embajadores una vez al mes. Debido al conflicto con Ucrania, el diálogo estuvo congelado entre junio de 2014 y abril de 2016. En el último tiempo hubo encuentros, pero no regulares.
"Apoyamos las conversaciones cuando hay un objetivo", dijo Tillerson, quien añadió que una normalización del diálogo y encuentros regulares con Rusia sólo serían posibles si hay avances en la solución del conflicto con Ucrania. El funcionario aclaró que no habrá reuniones solo para hablar.
Tillerson representa así una posición distinta a Alemania, que promueve desde hace tiempo un diálogo más intenso con Rusia en la OTAN. El ministro del Exterior alemán, Sigmar Gabriel, había pedido este martes durante el encuentro "seguir en conversaciones con Rusia" a pesar de las políticas rusas que generan inseguridad en la alianza atlántica.
Además de las conversaciones a nivel militar, el debate de la OTAN gira en torno sobre todo del Consejo OTAN-Rusia. Este es considerado el foro más importante para conversaciones políticas entre la OTAN y Rusia. Fue fundado en 2002 para involucrar más estrechamente a Rusia en la alianza transatlántica y generar confianza entre los antiguos enemigos.
El Consejo debe sesionar a nivel embajadores una vez al mes. Debido al conflicto con Ucrania, el diálogo estuvo congelado entre junio de 2014 y abril de 2016. En el último tiempo hubo encuentros, pero no regulares.
