
El ejército anunció el jueves la formación de un "consejo consultivo" para preparar el procedimiento de redacción de una Constitución, ignorando los llamados de los Hermanos Musulmanes.
El consejo de 30 miembros está compuesto por intelectuales y personalidades políticas y examinará además otro proyecto sobre la elección del presidente de la República, prevista para antes de que termine el 2012, indicó en comunicado el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA).
Los Hermanos Musulmanes acusaron el jueves al ejército egipcio de "marginar al Parlamento" y anunciaron que se retirarán de un grupo de contacto con las fuerzas armadas.
"Consideramos que cualquier intento de marginar al Parlamento o de reducir sus prerrogativas para acrecentar las de cualquier entidad no electa, tiende a soslayar la voluntad popular", dijo a la AFP Muamar el Baltagui, dirigente del partido Libertad y Justicia, formado por los Hermanos Musulmanes.
Los islamistas optaron por retirarse de este grupo después de que un alto oficial militar declaró que las fuerzas armadas tendrán cierto poder de decisión para designar a quienes redactarán la futura Constitución, decisión que marginaría al Parlamento, explicó Baltagui.
Los Hermanos Musulmanes, que triunfaron en la primera fase de las elecciones legislativas egipcias, habían iniciado conversaciones con las fuerzas armadas para formar un consejo consultivo integrado por intelectuales y personalidades políticas.
Para el general Mojtar al Mula, dicho consejo consultivo y el gobierno de transición deberán aprobar la designación de quienes redactarán la nueva Constitución.
Tal perspectiva reduciría considerablemente la capacidad de los islamistas de influir en la elaboración de la futura Constitución, etapa crucial en la definición del equilibrio de poderes tras la caída del presidente Hosni Mubarak en febrero.
Esto podría responder a los temores de los medios liberales y laicos, cristianos de Egipto y de los militares frente a la posibilidad de ver a los islamistas definir la futura ley fundamental según sus principios político-religiosos. Asimismo, también podría responder a los temores de Israel de verse rechazado por un futuro gobierno islamista.
Los resultados oficiales de la segunda vuelta de las legislativas en Egipto confirmaron la aplastante victoria de los islamistas, que obtuvieron más de tres de cada cuatro escaños al cabo de la fase inicial de esta primera elección de la época post-Mubarak.
Las diversas organizaciones islamistas obtuvieron un total de 113 escaños sobre los 168 en disputa en las dos vueltas de la primera fase de la elección, según resultados entregados por la prensa este jueves.
Los Hermanos Musulmanes obtienen 80 escaños, seguidos por el partido salafista (fundamentalista) AnNur ('La Luz') con 33 escaños, en estas dos vueltas de las legislativas celebradas los 28 y 29 de noviembre y los 5 y 6 de diciembre.
Los partidos liberales laicos obtienen 33 escaños y el resto va para los candidatos independientes o las pequeñas formaciones.
Estos resultados se refieren al primer tercio de las gobernaciones de Egipto, entre ellas las grandes ciudades de El Cairo y Alejandría. Las otras regiones deben elegir sus diputados a partir del 14 de diciembre y hasta el 11 de enero.
La elección de los diputados del más populoso país árabe, con más de 80 millones de habitantes, continuará desde fines de enero hasta mediados de marzo por la de los senadores.
El ejército en el poder desde la caída de Mubarak prometió entregar el poder a los civiles después de una elección presidencial prevista a más tardar para fines de junio de 2012.
El Consejo militar (CSFA) que dirige el país designó el miércoles un nuevo gobierno de transición, dirigido por un primer ministro, Kamal el Gansuri, con poderes reforzados para enfrentar la crisis que afecta a la economía del país y la degradación de la seguridad.
Un gran número de manifestantes que ocupaban la plaza Liberación-Tahrir, emblemático foco de la revuelta de enero y febrero en El Cairo, acampan ahora delante de la sede del gobierno, para afirmar su rechazo a Gansuri, que consideran como un vestigio del antiguo régimen.
Estos militantes piden la salida inmediata del poder militar.
El consejo de 30 miembros está compuesto por intelectuales y personalidades políticas y examinará además otro proyecto sobre la elección del presidente de la República, prevista para antes de que termine el 2012, indicó en comunicado el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA).
Los Hermanos Musulmanes acusaron el jueves al ejército egipcio de "marginar al Parlamento" y anunciaron que se retirarán de un grupo de contacto con las fuerzas armadas.
"Consideramos que cualquier intento de marginar al Parlamento o de reducir sus prerrogativas para acrecentar las de cualquier entidad no electa, tiende a soslayar la voluntad popular", dijo a la AFP Muamar el Baltagui, dirigente del partido Libertad y Justicia, formado por los Hermanos Musulmanes.
Los islamistas optaron por retirarse de este grupo después de que un alto oficial militar declaró que las fuerzas armadas tendrán cierto poder de decisión para designar a quienes redactarán la futura Constitución, decisión que marginaría al Parlamento, explicó Baltagui.
Los Hermanos Musulmanes, que triunfaron en la primera fase de las elecciones legislativas egipcias, habían iniciado conversaciones con las fuerzas armadas para formar un consejo consultivo integrado por intelectuales y personalidades políticas.
Para el general Mojtar al Mula, dicho consejo consultivo y el gobierno de transición deberán aprobar la designación de quienes redactarán la nueva Constitución.
Tal perspectiva reduciría considerablemente la capacidad de los islamistas de influir en la elaboración de la futura Constitución, etapa crucial en la definición del equilibrio de poderes tras la caída del presidente Hosni Mubarak en febrero.
Esto podría responder a los temores de los medios liberales y laicos, cristianos de Egipto y de los militares frente a la posibilidad de ver a los islamistas definir la futura ley fundamental según sus principios político-religiosos. Asimismo, también podría responder a los temores de Israel de verse rechazado por un futuro gobierno islamista.
Los resultados oficiales de la segunda vuelta de las legislativas en Egipto confirmaron la aplastante victoria de los islamistas, que obtuvieron más de tres de cada cuatro escaños al cabo de la fase inicial de esta primera elección de la época post-Mubarak.
Las diversas organizaciones islamistas obtuvieron un total de 113 escaños sobre los 168 en disputa en las dos vueltas de la primera fase de la elección, según resultados entregados por la prensa este jueves.
Los Hermanos Musulmanes obtienen 80 escaños, seguidos por el partido salafista (fundamentalista) AnNur ('La Luz') con 33 escaños, en estas dos vueltas de las legislativas celebradas los 28 y 29 de noviembre y los 5 y 6 de diciembre.
Los partidos liberales laicos obtienen 33 escaños y el resto va para los candidatos independientes o las pequeñas formaciones.
Estos resultados se refieren al primer tercio de las gobernaciones de Egipto, entre ellas las grandes ciudades de El Cairo y Alejandría. Las otras regiones deben elegir sus diputados a partir del 14 de diciembre y hasta el 11 de enero.
La elección de los diputados del más populoso país árabe, con más de 80 millones de habitantes, continuará desde fines de enero hasta mediados de marzo por la de los senadores.
El ejército en el poder desde la caída de Mubarak prometió entregar el poder a los civiles después de una elección presidencial prevista a más tardar para fines de junio de 2012.
El Consejo militar (CSFA) que dirige el país designó el miércoles un nuevo gobierno de transición, dirigido por un primer ministro, Kamal el Gansuri, con poderes reforzados para enfrentar la crisis que afecta a la economía del país y la degradación de la seguridad.
Un gran número de manifestantes que ocupaban la plaza Liberación-Tahrir, emblemático foco de la revuelta de enero y febrero en El Cairo, acampan ahora delante de la sede del gobierno, para afirmar su rechazo a Gansuri, que consideran como un vestigio del antiguo régimen.
Estos militantes piden la salida inmediata del poder militar.