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Política
"Lanzamos hoy nuevas operaciones contra las FDLR", declaró el general Didier Etumba en Beni, en el norte de la provincia de Kivu del Norte, refiriéndose a los rebeldes de las Fuerzas Democráticas de Liberación de Ruanda.
"Es una operación de las FARDC", las fuerzas armadas de la RDC, agregó Etumba.
"No se trata de una operación conjunta entre las FARDC y la MONUSCO. Las FARDC planificaron todo", confirmó el general brasileño Carlos Alberto dos Santos, comandante de la MONUSCO, la misión de la ONU en la RDC.
Los rebeldes de las FDLR tenían plazo hasta el 2 de enero para entregar las armas y rendirse, un ultimátum impuesto por la ONU y dirigentes africanos.
Tras vencer este ultimátum sin respuesta de las FDLR, la ONU esperaba que el presidente de la República Democrática del Congo, Joseph Kabila, autorizara un plan conjunto para lanzar una operación militar en el este del país y expulsar a los rebeldes ruandeses.
No obstante, según una fuente militar, el mandatario no firmó la orden de atacar conforme a ese plan.
Varios dirigentes de las FDLR están acusados de haber participado en el genocidio de 1994 contra los tutsis en Ruanda. Hoy día se calcula que cuentan con unos 1.500 combatientes desplegados por las montañas del este del Congo, en la frontera entre Ruanda y Burundi.
La misión de la ONU en el Congo, presente desde 1999, es una de las más importantes en el mundo, con más de 25.600 empleados, 21.200 soldados, observadores, militares y policías, y más de 4.000 civiles.
