Essebsi obtuvo más de 1,7 millones de votos en la segunda vuelta del domingo, contra más de 1,3 millones para su rival (44,32% de los sufragios), declaró a la prensa el presidente de la ISIE, Shafik Sarsar.
La participación alcanzó el 60,1% de las personas habilitadas para votar.
El bando de Essebsi había reivindicado el triunfo pocos minutos después de cerrarse las mesas electorales el domingo, sin brindar porcentajes.
El equipo de Marsuki había tildado de "infundado" el anuncio de la victoria electoral de Essebsi, afirmando que, por el momento, la diferencia de votos era muy pequeña, de "algunos miles de votos".
Essebsi será el primer presidente electo democráticamente desde la independencia del país en 1956.
Habib Burguiba, el primer presidente, y Sin al Abidin Ben Alí, que en enero de 2011 escapó a Arabia Saudita huyendo de una revolución popular, recurrieron siempre al fraude o al plebiscito. Marsuki, por su lado, fue designado gracias a un acuerdo político con los islamistas del partido Annahda.
Con estos comicios, los tunecinos esperan sellar cuatro años de difícil transición, desde la caída en enero de 2011 de Sin al Abidin Ben Alí, que supuso el pistoletazo de salida de la Primavera Árabe.