El ataque tuvo lugar por la mañana en el pueblo de Nargas, a unos 25 kilómetros de Wana, la principal ciudad de Waziristán del Sur, un refugio de los talibanes, de Al Qaida y de combatientes extranjeros, como uzbekos o uigures.
"Al menos siete insurgentes, entre ellos cuatro extranjeros, murieron en este ataque", dijo a la AFP una fuente de los servicios de seguridad pakistaníes que no quiso identificarse.
Uno de los fallecidos es Abdullah Haqqani, miembro de un importante clan de talibanes, precisó.
"Haqqani era responsable de enviar kamikazes a Afganistán", desde zonas tribales paquistaníes", añadió. Una segunda fuente de seguridad y una fuente de los talibanes también confirmaron esta muerte.
La semana pasada el departamento de Estado norteamericano añadió a su lista de "terroristas internacionales" el nombre de uno de los principales comandantes talibanes en Waziristán del Sur, Khan Said Sajna, aunque hace unos meses había roto su relación con la dirección central del Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP, talibanes paquistaníes).
Sin embargo, según fuentes locales, las cuatro víctimas del ataque son combatientes extranjeros, entre ellos un árabe y un turcomano.
Estados Unidos, que lleva cerca de diez años bombardeando las zonas tribales del noroeste de Pakistán, había frenado sus operaciones a principios de este año para facilitar las negociaciones de paz entre el gobierno de Islamabad y el TTP.
Pero Washington decidió reanudar los ataques tras una operación en junio del ejército pakistaní en Waziristán del Norte, prueba del fracaso de las negociaciones.
Desde que empezó esta operación, al menos 1.100 insurgentes han muerto, según las fuerzas pakistaníes, aunque los talibanes aseguran que muchos de sus combatientes abandonaron la zona al comenzar la ofensiva.