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"Al menos 20 integrantes de EI murieron y varios fueron heridos en ataques aéreos" contra "un campo de entrenamiento de ese grupo en Raqa", indicó el OSDH.
Los ataques destruyeron 14 de los vehículos militares del EI, indicó la fuente.
El 29 de junio, los yihadistas sunitas, que lanzaron el 9 de junio una ofensiva fulgurante en Irak, proclamaron la creación de un "califato" en las zonas bajo su control en Irak y Siria e instaron a todos los musulmanes a jurar lealtad a su jefe.
Las principales facciones de la rebelión siria rechazaron esa proclamación, considerándola "nula y sin fundamento, legal y lógicamente".
Los yihadistas controlan firmemente Raqa, su bastión, y se han hecho con importantes partes del territorio del este de Siria y de la vecina Irak.
El régimen sirio del presidente Bashar al Asad, por su parte, ha intensificado sus ataques contra las posiciones del EI desde que el grupo lanzó su ofensiva en Irak.
Los kurdos sirios, por su parte, llevan luchando contra el EI desde 2013.
El miércoles, un yihadista tunecino llevó a cabo un ataque suicida con coche bomba contra la ciudad kurda de Ain Eissa, matando a cuatro combatientes kurdos.
El martes, 22 yihadistas del EI y 18 combatientes kurdos murieron en combates que seguían el miércoles en el área kurda de la provincia de Alepo.
La televisión siria indicó también que los rebeldes llevaron a cabo una "masacre" durante la noche, incluido contra mujeres y niños, en el pueblo de Khatab, en la provincia céntrica de Hama. Según el OSDH, siete mujeres y siete hombres fueron "ejecutados" por combatientes rebeldes, que acusaban a las víctimas de "colaborar con el régimen criminal".
En Alepo, en el norte de Siria, cuatro personas murieron y decenas resultaron heridas en bombardeos contra las zonas rebeldes, dijo también el Observatorio.
