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Uno de los barcos de la flotilla
"La amenaza del ocupante de impedir que la 'flotilla de la paz" llegue hasta la franja de Gaza sometida a bloqueo es piratería sionista y una violación del derecho internacional", afirmó en un comunicado un alto responsable del Hamas, Ismail Radwan.
"Esas fanfarronadas son una indicación de la mentalidad terrorista sionista", agregó.
"El ocupante está preocupado por esos barcos (...) porque dan una legitimidad al compromiso con el gobierno palestino y confirman que las tentativas de aislar al Hamas han fracasado", estimó.
Varios cientos de militantes pro palestinos esperan atracar en Gaza el próximo fin de semana a bordo de nueve barcos cargados con 10.000 toneladas de ayuda humanitaria y de material de construcción. Quieren romper el bloqueo impuesto por Israel desde 2007, cuando el Hamas (acrónimo en árabe del Movimiento de Resistencia Islámica) tomó por la fuerza el poder en ese territorio.
Una fuente militar israelí indicó el miércoles que la marina de guerra había "terminado los preparativos" para interceptar la flotilla.
Si los barcos se niegan a regresar serán capturado y llevados a un puerto israelí, los militantes pacifistas serán detenidos y devueltos a sus países. Después de ser inspeccionado, "el cargamento será transportado a Gaza por los pasos fronterizos" terrestres entre Israel y la franja de Gaza, según dicha fuente.
Un alto responsable del ejército israelí, el coronel Moshe Levy, calificó el miércoles a esa operación de "provocación", afirmando que la ayuda "no era necesaria", pues la situación humanitaria en Gaza era "buena y estable".
"Esas fanfarronadas son una indicación de la mentalidad terrorista sionista", agregó.
"El ocupante está preocupado por esos barcos (...) porque dan una legitimidad al compromiso con el gobierno palestino y confirman que las tentativas de aislar al Hamas han fracasado", estimó.
Varios cientos de militantes pro palestinos esperan atracar en Gaza el próximo fin de semana a bordo de nueve barcos cargados con 10.000 toneladas de ayuda humanitaria y de material de construcción. Quieren romper el bloqueo impuesto por Israel desde 2007, cuando el Hamas (acrónimo en árabe del Movimiento de Resistencia Islámica) tomó por la fuerza el poder en ese territorio.
Una fuente militar israelí indicó el miércoles que la marina de guerra había "terminado los preparativos" para interceptar la flotilla.
Si los barcos se niegan a regresar serán capturado y llevados a un puerto israelí, los militantes pacifistas serán detenidos y devueltos a sus países. Después de ser inspeccionado, "el cargamento será transportado a Gaza por los pasos fronterizos" terrestres entre Israel y la franja de Gaza, según dicha fuente.
Un alto responsable del ejército israelí, el coronel Moshe Levy, calificó el miércoles a esa operación de "provocación", afirmando que la ayuda "no era necesaria", pues la situación humanitaria en Gaza era "buena y estable".
