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Política
Ismail Haniyeh.
"Estamos a favor de un diálogo que conduzca a una estrategia común sobre Palestina, y de la aplicación del acuerdo de reconciliación que hemos firmado", declaró a la prensa el primer ministro de Hamas en Gaza, Ismail Haniyeh.
Hamas y su rival Fatah, el partido de Abas, concluyeron un acuerdo de "reconciliación nacional" la pasada primavera en El Cairo. El texto se ha quedado en papel mojado por las divergencias sobre la formación de un nuevo gobierno palestino.
El movimiento islamista acusa ahora a Abas de haber actuado sin consenso, al pedir el pasado viernes a la ONU la adhesión de un Estado palestino "en base a las fronteras del 4 de junio de 1967 con Jerusalén Este como capital".
"No estamos en contra de un Estado, pero no estamos de acuerdo con esa iniciativa", recalcó Haniyeh.
"La causa palestina es la causa de una nación, y algunos dirigentes palestinos no deberían enfrentarse solos a las políticas estadounidenses y sionistas", argumentó.
Hamas teme en particular que la creación del nuevo Estado ponga en peligro los derechos de los refugiados que se encuentran fuera de los territorios palestinos.
El movimiento aboga por la creación de un Estado palestino "del mar (Mediterráneo) al río (Jordán)", en lugar del Estado de Israel. Sin embargo, se ha declarado dispuesto a una tregua de larga duración con el Estado hebreo si éste se retira de los territorios ocupados desde junio de 1967, es decir, Cisjordania y Jerusalén Este.
Haniyeh reiteró este lunes que su movimiento aceptaría la creación de un Estado palestino en "cualquier parte del territorio liberado", pero sin reconocer al Estado de Israel.
"Estimamos que la liberación viene antes del Estado, porque no se pueden crear Estados con decisiones de la ONU o mediante maniobras y compromisos", añadió Haniyeh.
A su regreso de Nueva York, Mahmud Abas dijo que se comprometía a abrir "en una etapa próxima un diálogo profundo" con Hamas.
Hamas y su rival Fatah, el partido de Abas, concluyeron un acuerdo de "reconciliación nacional" la pasada primavera en El Cairo. El texto se ha quedado en papel mojado por las divergencias sobre la formación de un nuevo gobierno palestino.
El movimiento islamista acusa ahora a Abas de haber actuado sin consenso, al pedir el pasado viernes a la ONU la adhesión de un Estado palestino "en base a las fronteras del 4 de junio de 1967 con Jerusalén Este como capital".
"No estamos en contra de un Estado, pero no estamos de acuerdo con esa iniciativa", recalcó Haniyeh.
"La causa palestina es la causa de una nación, y algunos dirigentes palestinos no deberían enfrentarse solos a las políticas estadounidenses y sionistas", argumentó.
Hamas teme en particular que la creación del nuevo Estado ponga en peligro los derechos de los refugiados que se encuentran fuera de los territorios palestinos.
El movimiento aboga por la creación de un Estado palestino "del mar (Mediterráneo) al río (Jordán)", en lugar del Estado de Israel. Sin embargo, se ha declarado dispuesto a una tregua de larga duración con el Estado hebreo si éste se retira de los territorios ocupados desde junio de 1967, es decir, Cisjordania y Jerusalén Este.
Haniyeh reiteró este lunes que su movimiento aceptaría la creación de un Estado palestino en "cualquier parte del territorio liberado", pero sin reconocer al Estado de Israel.
"Estimamos que la liberación viene antes del Estado, porque no se pueden crear Estados con decisiones de la ONU o mediante maniobras y compromisos", añadió Haniyeh.
A su regreso de Nueva York, Mahmud Abas dijo que se comprometía a abrir "en una etapa próxima un diálogo profundo" con Hamas.
