Los restos del
"Las pruebas llevan a concluir de manera abrumadora que un torpedo fue disparado por un submarino norcoreano", estimó el equipo de investigadores internacionales en su informe.
"No hay otra explicación posible", indicaron, precisando que la explosión que partió al buque en dos fue provocada por un torpedo norcoreano de 250 kg.
Corea del Norte calificó inmediatamente como "inventos" las conclusiones de los investigadores, según la agencia Yonhap.
"Tomaremos medidas enérgicas, entre ellas una guerra general, si se aplican sanciones a Corea del Norte", advirtió la Comisión de Defensa Nacional (NDC), órgano más poderoso del régimen comunista norcoreano, presidido por el líder Kim Jong-Il, en un comunicado citado por Yonhap.
El comunicado difundido por la radio norcoreana precisó además que Pyongyang enviará a sus propios investigadores a Corea del Sur para verificar las pruebas citadas en el informe.
Iguales "medidas enérgicas", pero esta vez contra Corea del Norte, prometió el presidente surcoreano Lee Myung-Bak luego de la publicación del informe.
En conversación telefónica con el primer ministro australiano Kevin Rudd Lee indicó que "medidas enérgicas serán adoptadas contra Corea del Norte", según un comunicado dado a conocer por el gabinete presidencial.
Gracias a una fuerte cooperación internacional, Corea del Sur "deberá hacer que Corea del Norte reconozca su mala acción y que vuelva a ser un miembro responsable de la comunidad internacional", agregó.
Estados Unidos "condena enérgicamente el acto de agresión", declaró el vocero de la Casa Blanca, Robert Gibbs.
El vocero indicó que el informe emitido por un equipo multinacional que investigó el siniestro del 26 de marzo reflejó un "estudio objetivo y científico de la evidencia".
Por ello, el presidente estadounidense Barack Obama expresó su "sentido pésame" al presidente surcoreano Lee Myung-Bak y a su pueblo, por la pérdida de 46 vidas a bordo del buque, indicó Gibbs.
Asimismo, Gran Bretaña denunció "el flagrante desdén a sus compromisos internacionales" de Pyongyang, según declaraciones del ministro británico de Relaciones Exteriores, William Hague, en un comunicado.
El primer ministro japonés, Yukio Hatoyama, juzgó "imperdonable" el gesto de Corea del Norte.
En el contexto de esta tensión, el secretario general de las Naciones Unidas,Ban Ki-moon calificó el informe que acusa a Corea del Norte como "profundamente inquietantes".
"Los hechos expuestos en el informe son profundamente inquietante. En tanto secretario general de las Naciones Unidas, seguiré de cerca las evoluciones del caso", agregó.
Por su parte, China llamó a "la moderación de todas las partes" luego de la acusación contra Corea del Norte de la cual es uno de los escasos aliados, agregando que hará "su propia evaluación".
"Todas la partes deberían mantener la calma y dar pruebas de moderación (...) para evitar una escalada", declaró el portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores Ma Zhaoxu, interrogado sobre las conclusiones de la investigación internacional que acusó a Corea del Norte.
"China hace su propia evaluación" de esta investigación, agregó el portavoz en un encuentro regular con la prensa, precisando no obstantes que ésto no significa que Pekín iniciaría su propia investigación.
"No hay otra explicación posible", indicaron, precisando que la explosión que partió al buque en dos fue provocada por un torpedo norcoreano de 250 kg.
Corea del Norte calificó inmediatamente como "inventos" las conclusiones de los investigadores, según la agencia Yonhap.
"Tomaremos medidas enérgicas, entre ellas una guerra general, si se aplican sanciones a Corea del Norte", advirtió la Comisión de Defensa Nacional (NDC), órgano más poderoso del régimen comunista norcoreano, presidido por el líder Kim Jong-Il, en un comunicado citado por Yonhap.
El comunicado difundido por la radio norcoreana precisó además que Pyongyang enviará a sus propios investigadores a Corea del Sur para verificar las pruebas citadas en el informe.
Iguales "medidas enérgicas", pero esta vez contra Corea del Norte, prometió el presidente surcoreano Lee Myung-Bak luego de la publicación del informe.
En conversación telefónica con el primer ministro australiano Kevin Rudd Lee indicó que "medidas enérgicas serán adoptadas contra Corea del Norte", según un comunicado dado a conocer por el gabinete presidencial.
Gracias a una fuerte cooperación internacional, Corea del Sur "deberá hacer que Corea del Norte reconozca su mala acción y que vuelva a ser un miembro responsable de la comunidad internacional", agregó.
Estados Unidos "condena enérgicamente el acto de agresión", declaró el vocero de la Casa Blanca, Robert Gibbs.
El vocero indicó que el informe emitido por un equipo multinacional que investigó el siniestro del 26 de marzo reflejó un "estudio objetivo y científico de la evidencia".
Por ello, el presidente estadounidense Barack Obama expresó su "sentido pésame" al presidente surcoreano Lee Myung-Bak y a su pueblo, por la pérdida de 46 vidas a bordo del buque, indicó Gibbs.
Asimismo, Gran Bretaña denunció "el flagrante desdén a sus compromisos internacionales" de Pyongyang, según declaraciones del ministro británico de Relaciones Exteriores, William Hague, en un comunicado.
El primer ministro japonés, Yukio Hatoyama, juzgó "imperdonable" el gesto de Corea del Norte.
En el contexto de esta tensión, el secretario general de las Naciones Unidas,Ban Ki-moon calificó el informe que acusa a Corea del Norte como "profundamente inquietantes".
"Los hechos expuestos en el informe son profundamente inquietante. En tanto secretario general de las Naciones Unidas, seguiré de cerca las evoluciones del caso", agregó.
Por su parte, China llamó a "la moderación de todas las partes" luego de la acusación contra Corea del Norte de la cual es uno de los escasos aliados, agregando que hará "su propia evaluación".
"Todas la partes deberían mantener la calma y dar pruebas de moderación (...) para evitar una escalada", declaró el portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores Ma Zhaoxu, interrogado sobre las conclusiones de la investigación internacional que acusó a Corea del Norte.
"China hace su propia evaluación" de esta investigación, agregó el portavoz en un encuentro regular con la prensa, precisando no obstantes que ésto no significa que Pekín iniciaría su propia investigación.