En una reunión entre el jefe de las operaciones humanitarias de la ONU Stephen O'Brien y los directores de las agencias humanitarias, "todas las agencias se pusieron de acuerdo para decretar el nivel tres por un período de seis meses", precisó el portavoz adjunto de la ONU Farhan Haq.
Este país de la península arábiga devastado por una guerra civil se une así a Irak, Sudán del Sur y Siria, donde se ha decretado este nivel máximo de alerta humanitaria.
Los combates en Yemen han dejado 2.800 muertos hasta finales del mes de junio, entre ellos 1.400 civiles, y 13.000 heridos desde marzo, según la ONU.
En Adén, escenario de combates permanentes, los rebeldes hutíes dispararon de madrugada una quincena de cohetes katyusha contra el barrio residencial de Mansura, indicó a la AFP Alí al Ahmadi, un portavoz de las fuerzas progubernamentales.
Los primeros cohetes cayeron en una calle llena de gente poco antes de que empezara el ayuno del Ramadán, según el portavoz. Los rebeldes bombardearon luego el mismo barrio, matando a varias personas que estaban enterrando a las víctimas de los primeros disparos.
El responsable sanitario de Adén informó de al menos 31 muertos y 103 heridos.
Durante la noche, una serie de ataques aéreos de la coalición árabe liderada por Arabia Saudí alcanzaron posiciones rebeldes en Dar Saad y Jor Maksar, dos barrios de Adén.
La población de Adén necesita víveres y se han detectado enfermedades como el paludismo, la fiebre tifoidea y el dengue por la falta de higiene y de medicamentos.
Según Naciones Unidas, más de 21,1 millones de yemeníes necesitan asistencia humanitaria -es decir el 80% de la población-, 13 millones de ellos sufren de escasez alimentaria y 9,4 millones tienen limitado el acceso al agua.
En la provincia vecina de Lahj, 13 rebeldes murieron en un ataque de la coalición contra un edificio en manos de los rebeldes hutíes y sus aliados, fieles al expresidente Alí Abdalá Saleh, indicó a la AFP un responsable local.
En Taez, una ciudad del centro del país, centenares de presos, algunos condenados a muerte, se escaparon el martes de la prisión aprovechando los enfrentamientos entre rebeldes chiitas hutíes y fuerzas leales al gobierno, indicaron estos últimos.
Asimismo, 21 rebeldes y nueve combatientes progubernamentales murieron en las últimas 24 horas en los enfrentamientos, según fuentes locales y médicas.
Los rebeldes chiitas hutíes, apoyados por Irán, han conquistado desde julio de 2014 amplias regiones de Yemen. Para impedirles tomar todo el país, Arabia Saudí encabeza desde el 26 de marzo una coalición árabe que bombardea a los chiitas.
Desde entonces, al menos 46 militares y civiles saudíes murieron en la frontera entre ambos países por disparos procedentes de Yemen. El último fallecimiento tuvo lugar este martes, según la coalición.
El enviado de Naciones Unidas para Yemen, Ismail Ould Sheij Ahmed, quien retomó los contactos diplomáticos tras el fracaso de las negociaciones en Ginebra, se ha reunido con el gobierno yemení en el exilio en Riad, donde se reunió con el presidente yemení, Abd Rabo Mansur Hadi.
El enviado especial de Naciones Unidas para Yemen se mostró confiado en el establecimiento de una tregua humanitaria durante las dos últimas semanas de Ramadán, que permitiría entregar ayuda a la población.
"Continuamos optimistas respecto a nuestras posibilidad de alcanzarla", declaró Ismail Ould Sheij Ahmed a la AFP en Riad. "Conversamos con todas las partes", aseguró.
Respecto a las negociaciones de paz, el enviado de Naciones Unidas dijo que por el momento no había ningún "plan inmediato" para su reanudación.
El mediador prevé viajar ahora a la capital yemení Saná, controlada por los rebeldes, para conversar con los hutíes y con miembros del partido del expresidente Saleh.
Este país de la península arábiga devastado por una guerra civil se une así a Irak, Sudán del Sur y Siria, donde se ha decretado este nivel máximo de alerta humanitaria.
Los combates en Yemen han dejado 2.800 muertos hasta finales del mes de junio, entre ellos 1.400 civiles, y 13.000 heridos desde marzo, según la ONU.
En Adén, escenario de combates permanentes, los rebeldes hutíes dispararon de madrugada una quincena de cohetes katyusha contra el barrio residencial de Mansura, indicó a la AFP Alí al Ahmadi, un portavoz de las fuerzas progubernamentales.
Los primeros cohetes cayeron en una calle llena de gente poco antes de que empezara el ayuno del Ramadán, según el portavoz. Los rebeldes bombardearon luego el mismo barrio, matando a varias personas que estaban enterrando a las víctimas de los primeros disparos.
El responsable sanitario de Adén informó de al menos 31 muertos y 103 heridos.
Durante la noche, una serie de ataques aéreos de la coalición árabe liderada por Arabia Saudí alcanzaron posiciones rebeldes en Dar Saad y Jor Maksar, dos barrios de Adén.
La población de Adén necesita víveres y se han detectado enfermedades como el paludismo, la fiebre tifoidea y el dengue por la falta de higiene y de medicamentos.
Según Naciones Unidas, más de 21,1 millones de yemeníes necesitan asistencia humanitaria -es decir el 80% de la población-, 13 millones de ellos sufren de escasez alimentaria y 9,4 millones tienen limitado el acceso al agua.
- Soldado saudí fallecido -
En la provincia vecina de Lahj, 13 rebeldes murieron en un ataque de la coalición contra un edificio en manos de los rebeldes hutíes y sus aliados, fieles al expresidente Alí Abdalá Saleh, indicó a la AFP un responsable local.
En Taez, una ciudad del centro del país, centenares de presos, algunos condenados a muerte, se escaparon el martes de la prisión aprovechando los enfrentamientos entre rebeldes chiitas hutíes y fuerzas leales al gobierno, indicaron estos últimos.
Asimismo, 21 rebeldes y nueve combatientes progubernamentales murieron en las últimas 24 horas en los enfrentamientos, según fuentes locales y médicas.
Los rebeldes chiitas hutíes, apoyados por Irán, han conquistado desde julio de 2014 amplias regiones de Yemen. Para impedirles tomar todo el país, Arabia Saudí encabeza desde el 26 de marzo una coalición árabe que bombardea a los chiitas.
Desde entonces, al menos 46 militares y civiles saudíes murieron en la frontera entre ambos países por disparos procedentes de Yemen. El último fallecimiento tuvo lugar este martes, según la coalición.
- Optimismo para alcanzar tregua humanitaria -
El enviado de Naciones Unidas para Yemen, Ismail Ould Sheij Ahmed, quien retomó los contactos diplomáticos tras el fracaso de las negociaciones en Ginebra, se ha reunido con el gobierno yemení en el exilio en Riad, donde se reunió con el presidente yemení, Abd Rabo Mansur Hadi.
El enviado especial de Naciones Unidas para Yemen se mostró confiado en el establecimiento de una tregua humanitaria durante las dos últimas semanas de Ramadán, que permitiría entregar ayuda a la población.
"Continuamos optimistas respecto a nuestras posibilidad de alcanzarla", declaró Ismail Ould Sheij Ahmed a la AFP en Riad. "Conversamos con todas las partes", aseguró.
Respecto a las negociaciones de paz, el enviado de Naciones Unidas dijo que por el momento no había ningún "plan inmediato" para su reanudación.
El mediador prevé viajar ahora a la capital yemení Saná, controlada por los rebeldes, para conversar con los hutíes y con miembros del partido del expresidente Saleh.