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El Comité del Patrimonio Mundial de La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), que sesiona en Manama, la capital de Bahréin, aprobó la candidatura de la localidad andaluza, que alberga las ruinas de una ciudad fundada en el siglo X por el primer califa de Al Ándalus, Abderramán III, miembro de la dinastía Omeya.
Se trata de uno de los restos arqueológicos más importantes que perviven de la época árabe en la península Ibérica durante la Edad Media, que precisamente bajo el mandato de los Omeya alcanzó sus momentos de mayor esplendor poco antes de llegar al final del primer milenio.
La ciudad de Córdoba, al sur del país, fue su capital y es por eso que ya albergaba otros monumentos del Patrimonio Mundial, como su Mezquita y su centro histórico, a los que ahora se suma Medina Azahara.
Esta no tuvo una larga vida, ya que fue destruida en el año 1.010 durante los disturbios internos que desembocarían en la caída del califato.
Diversas autoridades locales y regionales, que habían lanzado campañas de apoyo al monumento arqueológico en los últimos meses, estuvieron presentes en la reunión de Manama, entre ellas la alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio.
La región española de Andalucía, cuyo nombre deriva del nombre que los árabes le dieron al territorio peninsular "Al Andalus", ya cuenta con trece declaraciones de patrimonio, de las cuales nueve fueron declarados Patrimonio Mundial de la Unesco, entre ellas la conocida Alhambra de Granada.
A estas hay que sumar tres más de Patrimonio Cultural Inmaterial: el flamenco, la revitalización del saber tradicional de la cal artesanal en Morón de la Frontera y la Fiesta de los Patios de Córdoba.
Para España, que ya tenía inscritos 40 monumentos culturales, cuatro naturales y dos mixtos, supone en total la declaración de patrimonio número 47, situándose tercero en el ranking mundial de la Unesco por delante de Francia con 46. Una lista que lidera Italia con 54 lugares inscritos, seguido de China con 52.
En la cumbre de Bahréin, que durará hasta el 4 de julio, se decidió incluir también la ciudad italiana de Ivrea, en la región de Piamonte, al norte del país. Una ciudad industrial construida entre 1930 y 1960 por el arquitecto Adriano Olivetti, según un diseño alternativo a las experiencias nacionales e internacionales implementadas durante el siglo XX.
Pendiente de la decisión del Comité siguen las candidaturas del parque Nacional de Chiribiquete-La maloca del jaguar en Colombia y el valle de Tehuacán-Cuicatlán, hábitat primigenio de Mesoamérica en México.
