
Estas manifestaciones se celebran por primera vez sin los islamistas del Movimiento Justicia y Caridad que se han retirado recientemente de la contestación prodemocrática protagonizada por los jóvenes desde el comienzo de este año.
Entre 4.000 y 5.000 personas se manifestaron en el barrio popular Hay Mohamadi de Casablanca para reiterar sus reivindicaciones democráticas, constató la AFP.
"Nos manifestamos para decir que la lucha seguirá pese a la retirada de las organizaciones políticas, tanto las islamistas como las otras", declaró a la AFP Hamza Mahfud, de la sección Casablanca del Movimiento.
Los islamistas de Justicia y Caridad, uno de los grupos más importantes en Marruecos, se han desligado del Movimiento del 20 de Febrero en diciembre "debido a ataques" que afirman haber sufrido de "algunos jóvenes" contestatarios.
Justicia y Caridad, prohibido pero tolerado por las autoridades marroquíes, se unió al Movimiento del 20 de Febrero nada más comenzar la contestación democrática, en la estela de la Primavera Árabe.
"Nuestras reivindicaciones son legítimas y no han cambiado: una monarquía parlamentaria y más justicia social", agregó.
En Rabat, el número de manifestantes era muy inferior al de Casablanca: entre 300 y 500 personas.
"Queremos más justicia social", "el actual gobierno no cambiará nada", "no a la acumulación de la fortuna y del poder", gritaban los manifestantes en Rabat y en Casablanca.
Las manifestaciones continúan en el país a pesar de que el nuevo jefe del gobierno, el islamista moderado Abdelilah Benkiran, cuyo Partido Justicia y Desarrollo (PJD) ganó las legislativas de finales de noviembre, llamó al Movimiento del 20 de Febrero al diálogo.
Entre 4.000 y 5.000 personas se manifestaron en el barrio popular Hay Mohamadi de Casablanca para reiterar sus reivindicaciones democráticas, constató la AFP.
"Nos manifestamos para decir que la lucha seguirá pese a la retirada de las organizaciones políticas, tanto las islamistas como las otras", declaró a la AFP Hamza Mahfud, de la sección Casablanca del Movimiento.
Los islamistas de Justicia y Caridad, uno de los grupos más importantes en Marruecos, se han desligado del Movimiento del 20 de Febrero en diciembre "debido a ataques" que afirman haber sufrido de "algunos jóvenes" contestatarios.
Justicia y Caridad, prohibido pero tolerado por las autoridades marroquíes, se unió al Movimiento del 20 de Febrero nada más comenzar la contestación democrática, en la estela de la Primavera Árabe.
"Nuestras reivindicaciones son legítimas y no han cambiado: una monarquía parlamentaria y más justicia social", agregó.
En Rabat, el número de manifestantes era muy inferior al de Casablanca: entre 300 y 500 personas.
"Queremos más justicia social", "el actual gobierno no cambiará nada", "no a la acumulación de la fortuna y del poder", gritaban los manifestantes en Rabat y en Casablanca.
Las manifestaciones continúan en el país a pesar de que el nuevo jefe del gobierno, el islamista moderado Abdelilah Benkiran, cuyo Partido Justicia y Desarrollo (PJD) ganó las legislativas de finales de noviembre, llamó al Movimiento del 20 de Febrero al diálogo.