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Brahimi llegó a Damasco acompañado por el viceministro sirio de Asuntos Exteriores, Faysal Moqdad, en el marco de una gira para preparar la conferencia "Ginebra-2" con la que la comunidad internacional quiere encontrar una solución política al conflicto.
Se trata de la primera visita de Brahimi a Damasco desde diciembre de 2012. El emisario acudió previamente a todos los países de la región, incluidos Turquía y Irán, con la excepción de Arabia Saudita, contraria al proyecto ruso-estadounidense de conferencia de paz.
"Tras una crisis como esta, no se puede dar marcha atrás", previno Brahimi en una entrevista publicada el lunes por la noche en la página web del diario Jeune Afrique.
"El presidente Asad puede por tanto contribuir a la transición entre la Siria de antes, que es la de su padre [el anterior presidente Hafez al Asad] y la suya, y la que yo llamo la nueva República de Siria", añadió.
Sin embargo, tras el acuerdo sobre la destrucción del arsenal químico sirio, Asad se ha convertido en "socio", señaló el diplomático argelino de 79 años nombrado emisario para Siria por la ONU y la Liga Árabe en septiembre de 2012.
La dificultad de la misión de Brahimi se incrementó todavía más con las amenazas de 19 grupos islamistas sirios que rechazaron categóricamente la conferencia de paz "Ginebra-2" y aseguraron que los participantes en esta conferencia cometerán una "traición" de la cual deberán responder "ante nuestros tribunales".
El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguei Lavrov, declaró que "es indignante que algunas de estas organizaciones extremistas, terroristas que luchan contra las fuerzas gubernamentales en Siria, empiecen a amenazar (...) a aquellos que tienen la valentía" de concurrir a estas conversaciones de paz.
Para Thierry Pierret, un experto del islam en Siria, estos grupos islamistas "representan a una franja muy amplia de la oposición armada, desde los salafistas radicales del Frente Islámico Sirio hasta grupos mucho más moderados que son pilares del Ejército Sirio Libre".
"Por lo tanto, cabe afirmar que el rechazo de Ginebra-2 en las filas de los insurgentes es casi total (...) Una parte importante de la oposición política no querrá correr el riesgo de participar en una conferencia que le quitaría lo que le queda de legitimidad ante los grupos armados", agregó.
Además, "aunque haya opositores que participen en Ginebra-2 y lleguen a un acuerdo, dicho acuerdo no tendrá valor ninguno", puntualizó.
Por su parte, la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ), encargada de supervisar la destrucción del arsenal químico sirio prevista por una resolución de la ONU, anunció que sus expertos sobre el terreno no pudieron acceder a dos de los 23 sitios declarados por Siria "por razones de seguridad".
La resolución de la ONU sobre el desmantelamiento del arsenal químico sirio, adoptada tras un acuerdo entre Estados Unidos y Rusia, alejó la amenaza de una intervención militar estadounidense, lanzada tras un mortífero ataque con armas químicas atribuido al régimen sirio, el 21 de agosto, cerca de Damasco.
La Liga Árabe anunció este lunes una "reunión extraordinaria" de sus ministros de Relaciones Exteriores el 3 de noviembre en El Cairo para discutir sobre Siria y sobre un posible apoyo a la oposición siria ante la celebración de "Ginebra-2".
Sobre el terreno, el ejército retomó el control del pueblo cristiano de Sadad, en la provincia de Homs (centro), afirmó la agencia oficial de noticias SANA y el opositor Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSHD) confirmó la información y precisó que las fuerzas antigubernamentales se replegaron en Mahin, donde se encuentra un gran depósito de armas.
El domingo, el diputado sirio sunita Mohana Fayçal al Fayad fue secuestrado por combatientes islamistas tras enfrentamientos con miembros de su tribu, favorable al régimen, en la región de Deir Ezor (este), anunció este lunes el OSDH.
