La difusión de las instantáneas ha partido de la televisión australiana SBS, que supuestamente las compró en 2006 a raíz del escándalo de Abu Ghraib y que ayer decidió darlas a conocer.
Las fotografías muestran a prisioneros desnudos y ensangrentados, a un hombre con un mensaje grabado en las nalgas que dice "Soy un violador" en inglés, a un prisionero esposado y babeante, otro con el cuerpo lleno de excrementos y otro colgado con la cabeza boca abajo y sin ropa, entre otras aberrantes imágenes.
Mal momento para el presidente
La Administración Obama anunció el pasado miércoles que recurrirá la decisión de un tribunal de permitir la desclasificación de las 2.000 fotos, tal como había solicitado la Asociación Americana por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés).
La Casa Blanca alega que la publicación de las instantáneas podrían desencadenar una nueva ola de antiamericanismo en el mundo musulmán que pusiera en peligro la vida de los soldados estadounidenses allí destacados.
El nuevo escándalo llega en mal momento para el presidente Obama, después de que ayer anunciara el restablecimiento de las comisiones militares creadas por su predecesor, George W. Bush, para juzgar a presos sospechosos de terrorismo retenidos en el penal de Guantánamo, en Cuba.
Las fotografías muestran a prisioneros desnudos y ensangrentados, a un hombre con un mensaje grabado en las nalgas que dice "Soy un violador" en inglés, a un prisionero esposado y babeante, otro con el cuerpo lleno de excrementos y otro colgado con la cabeza boca abajo y sin ropa, entre otras aberrantes imágenes.
Mal momento para el presidente
La Administración Obama anunció el pasado miércoles que recurrirá la decisión de un tribunal de permitir la desclasificación de las 2.000 fotos, tal como había solicitado la Asociación Americana por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés).
La Casa Blanca alega que la publicación de las instantáneas podrían desencadenar una nueva ola de antiamericanismo en el mundo musulmán que pusiera en peligro la vida de los soldados estadounidenses allí destacados.
El nuevo escándalo llega en mal momento para el presidente Obama, después de que ayer anunciara el restablecimiento de las comisiones militares creadas por su predecesor, George W. Bush, para juzgar a presos sospechosos de terrorismo retenidos en el penal de Guantánamo, en Cuba.