"Estas últimas semanas, unos 7.000 combatientes iraníes e iraquíes llegaron a Siria y su primer objetivo es la defensa de la capital", afirmó a la AFP un miembro de los servicios de seguridad de Damasco, que pidió el anonimato. "El contingente más importante es iraquí".
"La meta es llegar a 10.000 hombres para respaldar al ejército sirio y las milicias progubernamentales, empezando por Damasco, y más adelante para retomar Jisr al Shugur, pues es el cierre hacia la costa mediterránea y la región de Hama, en el centro del país", agregó la misma fuente.
El ejército sirio perdió el 25 de abril Jisr al Shughur, en el noroeste del país, frente al ejército de la reconquista, una coalición integrada por rebeldes islamistas y del Frente Al Nosra, rama siria de Al Qaida.
Tras una serie de reveses frente a los yihadistas y los rebeldes, los responsables sirios pidieron a sus aliados rusos e iraníes que concretizaran su apoyo con actuaciones, explicó a la AFP un político sirio próximo al régimen.
Un llamado que se produce cuando los rebeldes parecen acentuar sus ofensivas.
Militares sirios afirman que tras un acuerdo reciente entre Arabia Saudí, Catar y Turquía, enemigos irreductibles del régimen de Bashar al Asad, los rebeldes que apoyan, divididos durante mucho tiempo, atacan ahora decenas de miles de posiciones del ejército gubernamental.
El jueves pasado, el jefe de Al Nosra, Abu Mohamad al Jolani, afirmó que la misión de su organización "en Siria es hacer caer el régimen, sus símbolos y sus aliados".
"La meta es llegar a 10.000 hombres para respaldar al ejército sirio y las milicias progubernamentales, empezando por Damasco, y más adelante para retomar Jisr al Shugur, pues es el cierre hacia la costa mediterránea y la región de Hama, en el centro del país", agregó la misma fuente.
El ejército sirio perdió el 25 de abril Jisr al Shughur, en el noroeste del país, frente al ejército de la reconquista, una coalición integrada por rebeldes islamistas y del Frente Al Nosra, rama siria de Al Qaida.
Tras una serie de reveses frente a los yihadistas y los rebeldes, los responsables sirios pidieron a sus aliados rusos e iraníes que concretizaran su apoyo con actuaciones, explicó a la AFP un político sirio próximo al régimen.
Un llamado que se produce cuando los rebeldes parecen acentuar sus ofensivas.
Militares sirios afirman que tras un acuerdo reciente entre Arabia Saudí, Catar y Turquía, enemigos irreductibles del régimen de Bashar al Asad, los rebeldes que apoyan, divididos durante mucho tiempo, atacan ahora decenas de miles de posiciones del ejército gubernamental.
El jueves pasado, el jefe de Al Nosra, Abu Mohamad al Jolani, afirmó que la misión de su organización "en Siria es hacer caer el régimen, sus símbolos y sus aliados".