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En Donetsk, controlada por los secesionistas, periodistas de la AFP pudieron oír explosiones cerca del aeropuerto, zona especialmente castigada por el conflicto en las últimas semanas. Los habitantes explicaron que el fuego de artillería se había intensificado a primeras horas de la mañana.
El ayuntamiento de Donetsk asegura que como consecuencia de los bombardeos un civil ha muerto y otro ha resultado herido.
Del lado de Kiev, el portavoz militar Andrei Lyssenko informó de un soldado muerto y cuatro heridos en las últimas 24 horas, denunciando asimismo la llegada de un nuevo convoy humanitario ruso al este de Ucrania.
Se trata del "cuarto envío de ayuda humanitaria rusa (...) 76 vehículos y 146 personas han pasado la frontera ucraniana y los guardias fronterizos solo han podido examinar los camiones de manera superficial. Rusia ha violado de forma flagrante la legislación ucraniana", declaró el portavoz militar.
El cese de hostilidades acordado entre Kiev y los insurgentes de Donetsk y Lugansk el pasado 5 de septiembre ha logrado reducir la violencia pero no detenerla completamente.
Unas 3.700 personas, en su mayoría civiles, han muerto desde el inicio del conflicto armado en abril, según cifras de la ONU.
El envío de ayuda humanitaria rusa es una fuente de tensión suplementaria entre Kiev y Moscú desde el envío del primer convoy, que Ucrania consideró como "intervención" de Rusia en el conflicto.
Con la endeble tregua aún en pie, los separatistas prorrusos celebrarán el domingo sus propias elecciones en los territorios que controlan en el este de Ucrania. Kiev y Occidente se oponen a dichos comicios, aunque Rusia ha dicho que reconocerá los resultados.
