
Brahimi, quien también se reunirá con el presidente egipcio Mohamed Mursi, llegó el domingo a El Cairo, donde también se reunirán este lunes representantes de Irán, Arabia Saudita, Turquía y Egipto para hablar de la situación en Siria.
"Me doy cuenta de que es una misión muy difícil, pero pienso que no tengo derecho a negarme a brindar ayuda al pueblo sirio", declaró Brahimi, tras entrevistarse con el secretario general de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, en la capital egipcia.
Brahimi agregó que viajará a Siria "en los próximos días" y que se entrevistará con "dirigentes y miembros de la sociedad civil", si bien aún no sabía si se reuniría con Asad.
Arabi estimó que la misión de Brahimi era "casi imposible" de llevar a cabo con éxito, pero afirmó confiar en la capacidad del diplomático argelino.
Brahimi inició así su primera visita oficial como enviado de la ONU y de la Liga Árabe tras suceder a Kofi Annan que dimitió el 2 de agosto admitiendo el fracaso de sus esfuerzos y atribuyéndolo a una falta de respaldo de las grandes potencias.
Desde su nombramiento, el diplomático argelino ha repetido que el futuro de Siria lo "determinará su pueblo y nadie más".
Por otra parte, la cancillería egipcia confirmó la realización el lunes en El Cairo de una reunión del grupo de contacto sobre Siria, que reúne a Irán, Arabia Saudita, Turquía y Egipto.
Delegaciones de las cancillerías de estos países hablarán de "los medios de poner fin al baño de sangre y alcanzar las aspiraciones del pueblo sirio", puntualizó.
Egipto intentará lograr "consenso" en torno a ciertos principios, como "el cese inmediato de los asesinatos y la violencia, el mantenimiento de la unidad, soberanía e integridad territorial de Siria; el rechazo de una intervención militar extranjera", agregó el ministerio de Relaciones Exteriores egipcio.
El ministerio también mencionó "la necesidad de lanzar un proceso político con la participación de las diversas partes del pueblo sirio".
En Siria, la fuerza aérea bombardeó varios barrios rebeldes de Alepo (norte).
Desde Ginebra, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, hizo el lunes un llamado ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU para que los autores de "crímenes de guerra" en Siria sean juzgados.
Denunció asimismo que ambas partes --régimen sirio y rebeldes-- hayan optado por la "fuerza" en lugar del "diálogo", e invitó a todos a apoyar los esfuerzos de Brahimi.