EFE - Jerusalén -
EEUU exige que Israel paralice toda la construcción en el Jerusalén ocupado, incluido en los barrios judíos ya establecidos, tales como French Hill o Ramat Shlomo, según fuentes oficiales israelíes en Jerusalén citadas por el rotativo.
Los cuatro meses de la moratoria en la edificación que pide Washington coinciden con el periodo propuesto por la Liga Árabe para las conversaciones indirectas.
En el Gobierno israelí "la opinión general es que es imposible anunciar públicamente una moratoria en la construcción en Jerusalén Este. Sin embargo, una posibilidad es que se llegue a un acuerdo tácito", explica Haaretz, el cual añade que el Ejecutivo podría aceptar que en los próximos cuatro meses no haya "construcción masiva planificada ni llevada a cabo en Jerusalén Este".
El rotativo recuerda que el pasado mes de diciembre Abás señaló en una entrevista con el diario que podría aceptar una "moratoria silenciosa", sin que ésta tuviera eco público.
EEUU exige que Israel paralice toda la construcción en el Jerusalén ocupado, incluido en los barrios judíos ya establecidos, tales como French Hill o Ramat Shlomo, según fuentes oficiales israelíes en Jerusalén citadas por el rotativo.
Israel, en principio, se niega
A cambio, Obama presionaría al presidente palestino, Mahmud Abás, que por el momento sólo ha aceptado mantener conversaciones indirectas con la mediación estadounidense, a que aceptase iniciar un diálogo directo. Los cuatro meses de la moratoria en la edificación que pide Washington coinciden con el periodo propuesto por la Liga Árabe para las conversaciones indirectas.
En el Gobierno israelí "la opinión general es que es imposible anunciar públicamente una moratoria en la construcción en Jerusalén Este. Sin embargo, una posibilidad es que se llegue a un acuerdo tácito", explica Haaretz, el cual añade que el Ejecutivo podría aceptar que en los próximos cuatro meses no haya "construcción masiva planificada ni llevada a cabo en Jerusalén Este".
El rotativo recuerda que el pasado mes de diciembre Abás señaló en una entrevista con el diario que podría aceptar una "moratoria silenciosa", sin que ésta tuviera eco público.