"Pedimos oficialmente a los gobiernos de Estados Unidos e Israel que presenten un mapa con las fronteras del Estado israelí que quieren que reconozcamos", indicó este miércoles el negociador palestino Yaser Abed Rabo a la AFP.
"Si este mapa se basa en las fronteras de 1967 y prevé terminar con la ocupación israelí de todos los territorios palestinos (...) reconoceremos a Israel con el nombre que tenga", afirmó Abed Rabo, quien, entre otras cosas, también es asesor del presidente de la Autoridad, Mahmud Abas.
"Estamos esperando una respuesta de Tel Aviv y Washington", agregó.
El martes, Estados Unidos había instado a la Autoridad a realizar una contrapropuesta a un ofrecimiento del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu que los palestinos habían rechazado.
Netanyahu propuso públicamente el lunes una nueva moratoria parcial de la colonización israelí en los territorios palestinos ocupados por su país en 1967, siempre y cuando los dirigentes palestinos reconozcan a Israel como "Estado Nación del pueblo judío".
Esta propuesta fue rechazado por la Autoridad por "no estar relacionado con el proceso de paz".
Para el portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Philip Crowley, la propuesta de Netanyahu constituye "una exigencia central del gobierno israelí que nosotros apoyamos".
Según Crowley, se trata de "reconocer que Israel forma parte de la región y de que la región acepta la existencia de Israel como patria del pueblo judío".
Los palestinos reconocieron formalmente el Estado de Israel en vísperas de los acuerdos de Oslo de 1993, pero se han negado a reconocerlo como "Estado judío", por considerar que equivaldría a renunciar incondicionalmente al derecho al regreso de los refugiados palestinos que tuvieron que abandonar su tierra con la creación de Israel en 1948 o de sus descendientes.
Afirman además que esto supondría un ataque a los derechos de la minoría árabe de Israel, compuesta por descendientes de los 160.000 palestinos que se quedaron en 1948, y que representan hoy cerca del 20% de la población.
"Israel tiene derecho a hacerse llamar como quiera, pero nosotros hemos reconocido al Estado de Israel", declaró el 20 de septiembre Abas, recalcando que la resolución 181 de la ONU de 1947 sobre el reparto de Palestina preveía expresamente "la creación de un Estado judío al lado de un Estado árabe con Jerusalén como capital internacional".
En un editorial publicado el martes, el diario israelí Haaretz recordó que antes de llegar al poder en abril de 2009, Netanyahu exigía a los palestinos durante la campaña electoral que contribuyan a la seguridad de Israel a cambio de contrapartidas.
"Ahora que no hay ataques terroristas, nuestro jefe de ventas inventó este gadget del Estado judío", ironiza el diario.
"Si este mapa se basa en las fronteras de 1967 y prevé terminar con la ocupación israelí de todos los territorios palestinos (...) reconoceremos a Israel con el nombre que tenga", afirmó Abed Rabo, quien, entre otras cosas, también es asesor del presidente de la Autoridad, Mahmud Abas.
"Estamos esperando una respuesta de Tel Aviv y Washington", agregó.
El martes, Estados Unidos había instado a la Autoridad a realizar una contrapropuesta a un ofrecimiento del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu que los palestinos habían rechazado.
Netanyahu propuso públicamente el lunes una nueva moratoria parcial de la colonización israelí en los territorios palestinos ocupados por su país en 1967, siempre y cuando los dirigentes palestinos reconozcan a Israel como "Estado Nación del pueblo judío".
Esta propuesta fue rechazado por la Autoridad por "no estar relacionado con el proceso de paz".
Para el portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Philip Crowley, la propuesta de Netanyahu constituye "una exigencia central del gobierno israelí que nosotros apoyamos".
Según Crowley, se trata de "reconocer que Israel forma parte de la región y de que la región acepta la existencia de Israel como patria del pueblo judío".
Los palestinos reconocieron formalmente el Estado de Israel en vísperas de los acuerdos de Oslo de 1993, pero se han negado a reconocerlo como "Estado judío", por considerar que equivaldría a renunciar incondicionalmente al derecho al regreso de los refugiados palestinos que tuvieron que abandonar su tierra con la creación de Israel en 1948 o de sus descendientes.
Afirman además que esto supondría un ataque a los derechos de la minoría árabe de Israel, compuesta por descendientes de los 160.000 palestinos que se quedaron en 1948, y que representan hoy cerca del 20% de la población.
"Israel tiene derecho a hacerse llamar como quiera, pero nosotros hemos reconocido al Estado de Israel", declaró el 20 de septiembre Abas, recalcando que la resolución 181 de la ONU de 1947 sobre el reparto de Palestina preveía expresamente "la creación de un Estado judío al lado de un Estado árabe con Jerusalén como capital internacional".
En un editorial publicado el martes, el diario israelí Haaretz recordó que antes de llegar al poder en abril de 2009, Netanyahu exigía a los palestinos durante la campaña electoral que contribuyan a la seguridad de Israel a cambio de contrapartidas.
"Ahora que no hay ataques terroristas, nuestro jefe de ventas inventó este gadget del Estado judío", ironiza el diario.