Protesta en Afganistán contra la posible quema del Corán
Miles de afganos enfurecidos arrojaron piedras contra una pequeña base militar de la OTAN en el noreste del país en protesta contra los planes, ahora cancelados, de una pequeña iglesia de Gainesville de quemar 200 ejemplares del Corán el sábado, nuevo aniversario de los atentados del 11 de septiembre.
El pastor de esa iglesia, Terry Jones, anunció ahora que no lo harán: "en este momento tenemos planes para no hacerlo", dijo Jones a la cadena ABC News.
Líder de la pequeña iglesia Dove World Outreach Center, Jones ya había anunciado la cancelación el jueves, pero tras una tensa disputa retórica con figuras musulmanas de Estados Unidos dijo horas más tarde que plan sólo estaba suspendido.
En el primer anuncio de cancelación el pastor dijo que lo hacía tras lograrse un acuerdo de reubicación de un proyectado centro islámico a pocas cuadras de la llamada "Zona cero" de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York.
Pero sus declaraciones se convirtieron en otra fuente de polémica luego de que los responsables del centro negaran cualquier trueque.
"No sabemos nada sobre el mismo", dijo el jueves a la AFP Daisy Khan, una de las principales promotoras y esposa de Feisal Abdul Rauf, el imán.
Por su parte, Rauf dijo a la CNN que "no vamos a jugar con nuestra religión o cualquier otra. Tampoco vamos a hacer un trueque".
Este viernes comienza para los musulmanes el festival Eid al Fitr, cuando se celebra el fin del mes de ayuno por el Ramadán, que podrían propiciar más respuestas a la controversia.
El presidente afgano Hamid Karzai, en su mensaje por el Eid, advirtió que Jones "no debería ni pensar" en quemar el Corán en un momento tan delicado, al tiempo que el presidente de Indonesia, el país de mayor población musulmana en el mundo, dijo que estaba en juego la paz mundial.
El presidente Susilo Bambang Yudhoyono volvió a criticar a Jones un día después que le solicitara a su par Barack Obama que intervenga.
"Esto amenaza la paz y la seguridad internacional. Esto es algo que pone en peligro la armonía entre las personas religiosas", dijo el mandatario en un discurso televisado en ocasión del fin del Ramadán.
La preocupación llegó a tal punto que el jueves el secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, telefoneó al pastor Jones para que cambiara de postura, al advertirle que la quema del Corán pondría en riesgo a los soldados estadounidenses en Afganistán.
La decisión sin par de que el gobierno ceda a la demanda del pastor de un contacto directo se produjo ante la creciente procupación en Washington.
El presidente Obama dijo poco antes que la quema del Corán sería "bueno para Al Qaida".
El pastor de esa iglesia, Terry Jones, anunció ahora que no lo harán: "en este momento tenemos planes para no hacerlo", dijo Jones a la cadena ABC News.
Líder de la pequeña iglesia Dove World Outreach Center, Jones ya había anunciado la cancelación el jueves, pero tras una tensa disputa retórica con figuras musulmanas de Estados Unidos dijo horas más tarde que plan sólo estaba suspendido.
En el primer anuncio de cancelación el pastor dijo que lo hacía tras lograrse un acuerdo de reubicación de un proyectado centro islámico a pocas cuadras de la llamada "Zona cero" de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York.
Pero sus declaraciones se convirtieron en otra fuente de polémica luego de que los responsables del centro negaran cualquier trueque.
"No sabemos nada sobre el mismo", dijo el jueves a la AFP Daisy Khan, una de las principales promotoras y esposa de Feisal Abdul Rauf, el imán.
Por su parte, Rauf dijo a la CNN que "no vamos a jugar con nuestra religión o cualquier otra. Tampoco vamos a hacer un trueque".
Este viernes comienza para los musulmanes el festival Eid al Fitr, cuando se celebra el fin del mes de ayuno por el Ramadán, que podrían propiciar más respuestas a la controversia.
El presidente afgano Hamid Karzai, en su mensaje por el Eid, advirtió que Jones "no debería ni pensar" en quemar el Corán en un momento tan delicado, al tiempo que el presidente de Indonesia, el país de mayor población musulmana en el mundo, dijo que estaba en juego la paz mundial.
El presidente Susilo Bambang Yudhoyono volvió a criticar a Jones un día después que le solicitara a su par Barack Obama que intervenga.
"Esto amenaza la paz y la seguridad internacional. Esto es algo que pone en peligro la armonía entre las personas religiosas", dijo el mandatario en un discurso televisado en ocasión del fin del Ramadán.
La preocupación llegó a tal punto que el jueves el secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, telefoneó al pastor Jones para que cambiara de postura, al advertirle que la quema del Corán pondría en riesgo a los soldados estadounidenses en Afganistán.
La decisión sin par de que el gobierno ceda a la demanda del pastor de un contacto directo se produjo ante la creciente procupación en Washington.
El presidente Obama dijo poco antes que la quema del Corán sería "bueno para Al Qaida".