Los heridos son tres policías y dos estudiantes. El enfrentamiento se produjo en una carretera cercano a Chilpancingo, capital de Guerrero, cuando agentes antimotines del estado trataron de evitar que los jóvenes se apoderaran de un camión cisterna con combustible.
"Lo que tenemos es únicamente tres policías lesionados, pero nada de gravedad", dijo el secretario de Seguridad Pública de Guerrero, Raúl Miliani.
Los alumnos respondieron con palos y piedras a los gases lacrimógenos que les lanzaron los antimotines, quedando dos estudiantes heridos y otros dos detenidos.
Posteriormente, los chicos atacaron con bombas molotov las instalaciones de la jefatura de la policía de Tixtla, municipio al cual pertenece la combativa escuela de Ayotzinapa, e incendiaron dos vehículos oficiales, informó el síndico local, David Martínez Veladez.
Durante el ataque, los manifestantes retuvieron a cuatro policías municipales, a quienes desarmaron y posteriormente liberaron, agregó el funcionario.
Las protestas violentas se han reproducido en Guerrero desde que, el pasado 26 de septiembre, los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecieron tras ser atacados por policías y narcotraficantes en la ciudad de Iguala.
A seis meses del terrible crimen que conmocionó al mundo, los familiares de los jóvenes siguen sin creer la versión oficial que asegura que los chicos fueron asesinados por narcotraficantes, calcinados y sus restos esparcidos por un río.
Sólo los restos de uno de los chicos han podido ser identificados por un prestigioso laboratorio forense de Austria.
El jueves, miles de personas volvieron a salir a las calles de la Ciudad de México para exigir justicia y la presentación con vida de los chicos al gobierno.