Los manifestantes antigubernamentales, que llevan desde el 2 de enero reclutados en el parque Malheur National Wildlife Refuge de Oregón, usaron tenazas y una excavadora para eliminar la verja que delimitaba el terreno de una familia de ganaderos.
Ammon Bundy, líder de la protesta, aseguró que el Servicio de Pesca y Vida Silvestre instaló esta cerca el año pasado para impedir que sus 600 cabezas de ganado usaran unas tierras que pertenecen al gobierno federal.
"Esto le ayudará a hacer funcionar su rancho como en el pasado", afirmó en una rueda de prensa cubierta por los medios locales.
La agencia federal condenó el lunes la acción de los manifestantes y avisó que el parque permanecerá cerrado hasta nuevo aviso.
"Esperamos que esto se resuelva pacíficamente y que el refugio vuelva a ser pronto un lugar seguro para trabajadores y visitantes", de acuerdo con un comunicado.
El grupo, formado por una decena de personas, tomó el parque el 2 de diciembre, en apoyo a dos granjeros sentenciados a cinco años por provocar varios incendios en 2001 y 2006 en tierras que el gobierno les cedía.
Ambos se distanciaron de la protesta y se entregaron a las instituciones penitenciarias de California la semana pasada para cumplir su pena.
Las autoridades han intentado en vano que los manifestantes abandonen sus acciones. Ellos afirman que sólo se irán cuando los ganaderos recuperen el pleno usufructo de los terrenos.
Los vecinos también han reclamado el fin de la protesta porque daña la economía local y no les representa. Los colegios reabrieron el lunes tras una semana cerrados como medida de seguridad.
La ocupación del parque ilustra el problema que el gobierno arrastra desde hace décadas sobre la concesión a rancheros de las inmensas tierras federales situadas principalmente al oeste del país.
Los ganaderos denuncian que las nuevas leyes para proteger el ecosistema entorpecen su profesión, en tanto defienden tener un derecho inalienable para que sus animales pasten los terrenos del estado.
Ammon Bundy, líder de la protesta, aseguró que el Servicio de Pesca y Vida Silvestre instaló esta cerca el año pasado para impedir que sus 600 cabezas de ganado usaran unas tierras que pertenecen al gobierno federal.
"Esto le ayudará a hacer funcionar su rancho como en el pasado", afirmó en una rueda de prensa cubierta por los medios locales.
La agencia federal condenó el lunes la acción de los manifestantes y avisó que el parque permanecerá cerrado hasta nuevo aviso.
"Esperamos que esto se resuelva pacíficamente y que el refugio vuelva a ser pronto un lugar seguro para trabajadores y visitantes", de acuerdo con un comunicado.
El grupo, formado por una decena de personas, tomó el parque el 2 de diciembre, en apoyo a dos granjeros sentenciados a cinco años por provocar varios incendios en 2001 y 2006 en tierras que el gobierno les cedía.
Ambos se distanciaron de la protesta y se entregaron a las instituciones penitenciarias de California la semana pasada para cumplir su pena.
Las autoridades han intentado en vano que los manifestantes abandonen sus acciones. Ellos afirman que sólo se irán cuando los ganaderos recuperen el pleno usufructo de los terrenos.
Los vecinos también han reclamado el fin de la protesta porque daña la economía local y no les representa. Los colegios reabrieron el lunes tras una semana cerrados como medida de seguridad.
La ocupación del parque ilustra el problema que el gobierno arrastra desde hace décadas sobre la concesión a rancheros de las inmensas tierras federales situadas principalmente al oeste del país.
Los ganaderos denuncian que las nuevas leyes para proteger el ecosistema entorpecen su profesión, en tanto defienden tener un derecho inalienable para que sus animales pasten los terrenos del estado.