La CNN, uno de los medios más prominentes de EEUU, ha violado, de este modo, la Primera Enmienda al despedir a Octavia Nasr.
Nasr más tarde se disculpó por su acción, pero la vicepresidenta de la CNN, Parisa Josravi, dijo el miércoles que la “credibilidad de Nasr se había visto comprometida.”
Nasr es una periodista libanesa, que reside en Atlanta y que había trabajado para la CNN durante 20 años, comenzando como redactora asignada a temas de internacional. Su trabajo tenía lugar, sobre todo, fuera de las cámaras, pero ocasionalmente aparecía en antena como analista para comentar noticias sobre Oriente Medio.
El Gran Ayatollah Fadlallah murió el domingo tras una larga enfermedad y numerosas personas y figuras de Líbano y el mundo árabe y musulmán tomaron parte en su funeral el martes.
En su nota colocada en Twitter el pasado fin de semana, Nasr dijo: “Es triste oír la noticia de la muerte de Sayyed Mohammed Hussein Fadlallah. Como uno de los gigantes de Hezbollah, lo respeto mucho.”
El comentario de Nasr provocó la ira del pro-sionista Honest Reporting, que se preguntó en su página web: “¿Es Nasr una simpatizante de Hezbollah. Esto es es bastante embarazoso, ya que el grupo está designado como una “organización terrorista” en EEUU y está comprometido con la destrucción del Estado de Israel.”
La CNN emitió una declaración calificando de “error de juicio” de Nasr la publicación de tales notas “simplistas”.
Nasr dijo más tarde en un blog que se estaba refiriendo a la actitud de Sayyed Fadlallah hacia los derechos de las mujeres. Su Eminencia había promulgado veredictos en los que abogaba por dar a las mujeres sus derechos, reconocidos en el Islam.
Ella escribió que Fadlallah era una “figura reverenciada en muchos países a pesar de haber sido designado como “terrorista” (por Israel y EEUU). En realidad, no es el tipo de vida que pueda ser comentada en una simple nota. Es algo que lamento profundamente.”
Sin embargo, Josravi dijo en un memorando el miércoles que ella había hablado con Nasr y “hemos acordado que ella dejará la compañía.”
Nasr más tarde se disculpó por su acción, pero la vicepresidenta de la CNN, Parisa Josravi, dijo el miércoles que la “credibilidad de Nasr se había visto comprometida.”
Nasr es una periodista libanesa, que reside en Atlanta y que había trabajado para la CNN durante 20 años, comenzando como redactora asignada a temas de internacional. Su trabajo tenía lugar, sobre todo, fuera de las cámaras, pero ocasionalmente aparecía en antena como analista para comentar noticias sobre Oriente Medio.
El Gran Ayatollah Fadlallah murió el domingo tras una larga enfermedad y numerosas personas y figuras de Líbano y el mundo árabe y musulmán tomaron parte en su funeral el martes.
En su nota colocada en Twitter el pasado fin de semana, Nasr dijo: “Es triste oír la noticia de la muerte de Sayyed Mohammed Hussein Fadlallah. Como uno de los gigantes de Hezbollah, lo respeto mucho.”
El comentario de Nasr provocó la ira del pro-sionista Honest Reporting, que se preguntó en su página web: “¿Es Nasr una simpatizante de Hezbollah. Esto es es bastante embarazoso, ya que el grupo está designado como una “organización terrorista” en EEUU y está comprometido con la destrucción del Estado de Israel.”
La CNN emitió una declaración calificando de “error de juicio” de Nasr la publicación de tales notas “simplistas”.
Nasr dijo más tarde en un blog que se estaba refiriendo a la actitud de Sayyed Fadlallah hacia los derechos de las mujeres. Su Eminencia había promulgado veredictos en los que abogaba por dar a las mujeres sus derechos, reconocidos en el Islam.
Ella escribió que Fadlallah era una “figura reverenciada en muchos países a pesar de haber sido designado como “terrorista” (por Israel y EEUU). En realidad, no es el tipo de vida que pueda ser comentada en una simple nota. Es algo que lamento profundamente.”
Sin embargo, Josravi dijo en un memorando el miércoles que ella había hablado con Nasr y “hemos acordado que ella dejará la compañía.”