"Es evidente que [los niños] no vienen con instrucciones pero ¿es normal que tengamos tan pocas recomendaciones?", dice el discurso de Cameron que avanza The Observer.
"Hemos avanzado mucho. Hemos desarrollado el seguimiento a domicilio tras el nacimiento. Pero sólo concierne las primeras semanas y meses. ¿Qué pasa más tarde, cuando empiezan los problemas de comunicación, de comportamiento, de disciplina?", añade el primer ministro.
El plan del gobierno prevé repartir vales a las familias más pobres para que puedan acudir a los cursos aunque Cameron quiere que el programa se dirija a todas las clases sociales.
The Observer recuerda que un plan similar puesto en marcha tras los disturbios de 2011 y dirigido a familias desfavorecidas fue un fracaso. En total participaron 2.956 personas (sólo un 9% de hombres), muchas menos de las 20.000 que se esperaban, y el programa costó 1.088 libras (1.450 euros) por persona.