"Diez personas murieron -nueve a causa de los disparos de la seguridad siria y una fue asesinada y lanzada al río Oronte- y más de 35 fueron heridas" afirmó a la AFP Rami Abdel Rahman, dirigente del Observatorio sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
"Los tanques están apostados en las entradas de la ciudad con excepción de la entrada norte. Los habitantes están movilizados, tomaron la decisión de defender su ciudad hasta la muerte para no permitir que el ejército entre en ella", indicó a la AFP Rami Abdel Rahman.
Hama, ciudad de 800.000 habitantes a 210 kilómetros al norte de la capital, es desde 1982 un símbolo histórico, después de la terrible represión de una revuelta del movimiento prohibido de los Hermanos musulmanes contra el entonces presidente Hafez al Asad, padre del actual jefe de Estado, Bashar, que dejó 20.000 muertos.
En Hama, "habitantes durmieron en las calles donde hicieron barricadas de sacos de arena y colocaron neumáticos para impedir cualquier asalto" del ejército.
"Los habitantes de Hama son pacíficos a 100%, el régimen sirio debe reflexionar antes de lanzar una operación militar en esta ciudad", dijeron militantes.
Más de 500 militantes y manifestantes "pacíficos" fueron detenidos en los últimos días en Siria, afirmó el martes el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) en un comunicado.
"El abogado Musab Barish fue detenido hoy en Idleb (noroeste). Cinco ciudadanos más fueron detenidos en la noche del lunes en la vecina localidad de Kafar Nubul por haber violado el toque de queda y tres militantes lo fueron en Yabal al Zawiya, agregó la ONG.
"El viernes, los servicios de seguridad del Estado arrestaron a la militante Bisane Hamed y a tres militantes más, en momentos en que se dirigían hacia Líbano. Desde entonces se desconoce su paradero", indicó.
En estos últimos días, "los servicios de seguridad detuvieron a decenas de personas en la provincia de Damasco", estimó el Observatorio.
En total fueron detenidas "en los últimos días más de 500 personas", indicó esta fuente.
La organización con sede en Londres denunció "enérgicamente las detenciones arbitrarias de opositores políticos, de militantes de la sociedad civil y de Derechos Humanos y de manifestantes pacíficos que siguen realizando las autoridades sirias, pese a haber levantado la ley de emergencia".
El presidente Bashar al Asad promulgó el 21 de abril un decreto que marca el final del estado de emergencia vigente desde 1963, lo cual constituía una de las principales reivindicaciones del movimiento opositor iniciado el 15 de marzo.
La represión del movimiento de protesta, que estalló el 15 de marzo en Siria, ha costado la vida a más de 1.300 civiles y obligado a miles de sirios a huir, según varias ONG.
En Damasco, unos 70 diputados se reunieron el martes para examinar las "salidas a la crisis".
Es la tercera reunión política desde hace más de una semana. El domingo, unas cien personalidades cercanas al poder, se reunieron para reflexionar sobre "una tercera vía".
El 27 de junio, una reunión congregó a un centenar de opositores independientes e intelectuales que llamaron a continuar el "levantamiento pacífico" hasta la llegada de la democracia en Siria.
"Los tanques están apostados en las entradas de la ciudad con excepción de la entrada norte. Los habitantes están movilizados, tomaron la decisión de defender su ciudad hasta la muerte para no permitir que el ejército entre en ella", indicó a la AFP Rami Abdel Rahman.
Hama, ciudad de 800.000 habitantes a 210 kilómetros al norte de la capital, es desde 1982 un símbolo histórico, después de la terrible represión de una revuelta del movimiento prohibido de los Hermanos musulmanes contra el entonces presidente Hafez al Asad, padre del actual jefe de Estado, Bashar, que dejó 20.000 muertos.
En Hama, "habitantes durmieron en las calles donde hicieron barricadas de sacos de arena y colocaron neumáticos para impedir cualquier asalto" del ejército.
"Los habitantes de Hama son pacíficos a 100%, el régimen sirio debe reflexionar antes de lanzar una operación militar en esta ciudad", dijeron militantes.
Más de 500 militantes y manifestantes "pacíficos" fueron detenidos en los últimos días en Siria, afirmó el martes el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) en un comunicado.
"El abogado Musab Barish fue detenido hoy en Idleb (noroeste). Cinco ciudadanos más fueron detenidos en la noche del lunes en la vecina localidad de Kafar Nubul por haber violado el toque de queda y tres militantes lo fueron en Yabal al Zawiya, agregó la ONG.
"El viernes, los servicios de seguridad del Estado arrestaron a la militante Bisane Hamed y a tres militantes más, en momentos en que se dirigían hacia Líbano. Desde entonces se desconoce su paradero", indicó.
En estos últimos días, "los servicios de seguridad detuvieron a decenas de personas en la provincia de Damasco", estimó el Observatorio.
En total fueron detenidas "en los últimos días más de 500 personas", indicó esta fuente.
La organización con sede en Londres denunció "enérgicamente las detenciones arbitrarias de opositores políticos, de militantes de la sociedad civil y de Derechos Humanos y de manifestantes pacíficos que siguen realizando las autoridades sirias, pese a haber levantado la ley de emergencia".
El presidente Bashar al Asad promulgó el 21 de abril un decreto que marca el final del estado de emergencia vigente desde 1963, lo cual constituía una de las principales reivindicaciones del movimiento opositor iniciado el 15 de marzo.
La represión del movimiento de protesta, que estalló el 15 de marzo en Siria, ha costado la vida a más de 1.300 civiles y obligado a miles de sirios a huir, según varias ONG.
En Damasco, unos 70 diputados se reunieron el martes para examinar las "salidas a la crisis".
Es la tercera reunión política desde hace más de una semana. El domingo, unas cien personalidades cercanas al poder, se reunieron para reflexionar sobre "una tercera vía".
El 27 de junio, una reunión congregó a un centenar de opositores independientes e intelectuales que llamaron a continuar el "levantamiento pacífico" hasta la llegada de la democracia en Siria.