
Todas las ecuaciones sugieren que la crisis económica podría tener un impacto mayor en las familias latinas ya que los sectores que han sido más afectados por la crisis, como la construcción y manufactura, son sectores que tienen una mayor representación y dependencia de trabajadores latinos.
En el año 2008, la economía perdió aproximadamente 2.56 millones de trabajos y el nivel de desempleo alcanzó el 7.2 por ciento, un nivel que no ha sido presenciado en más de 16 años. Pero para los Latinos la situación es aun peor, su nivel de pobreza es un 26.4 por ciento y el nivel de desempleo, previamente de 8.6 por ciento, subió al 9.2 por ciento en diciembre. Los Latinos son el segmento más joven y más creciente de la fuerza laboral de los Estados Unidos, sin embargo la capacidad económica de la comunidad Latina está en peligro.
El presidente electo Obama tendrá la responsabilidad de tomar medidas urgentes y adecuadas para cambiar el rumbo de la administración fallida y turbia que pronto heredará. Es crucial que el paquete de estimulo económico que se esta proponiendo le de prioridad a las familias de bajos recursos y comunidades de color que serán las más afectadas por esta crisis, en dicho contexto se debe asegurar una inclusión justa de la comunidad Latina.
La propuesta bajo consideración parece ser prometedora, pero posiblemente $775 billones no serán suficientes y un mayor enfoque en los más necesitados es necesario. Un paquete de estimulo que dé prioridad a las familias trabajadoras tiene que enfocarse en: la crisis hipotecaria e inmobiliaria, inversión en infraestructura, crear trabajos “verdes”, invertir en la investigación y el desarrollo de tecnologías de bajo consumo energético, y la ampliación y despliegue del acceso al internet de banda ancha a través del país. En algunas de esas áreas la comunidad Latina ya esta involucrada a fondo, otras representan áreas en las que nos tenemos que adentrar para conectarnos al futuro de la economía.
Las épocas de crisis requieren medidas audaces y acciones inmediatas para revitalizar nuestra economía y nuevamente atraer la prosperidad. Es necesario un plan de estímulo económico que incluya a las familias trabajadoras Latinas, que las eduque y las entrene para competir por las oportunidades de trabajo que se crearán en una economía nueva, más eficiente y sostenible. El paquete de estimulo propuesto por el presidente electo Obama es un paso en la dirección correcta, pero esta asistencia tiene que asegurar que los grupos más vulnerables de nuestra sociedad sean protegidos y que se otorguen las bases necesarias para que la clase trabajadora pueda escalar a la clase media.
En el año 2008, la economía perdió aproximadamente 2.56 millones de trabajos y el nivel de desempleo alcanzó el 7.2 por ciento, un nivel que no ha sido presenciado en más de 16 años. Pero para los Latinos la situación es aun peor, su nivel de pobreza es un 26.4 por ciento y el nivel de desempleo, previamente de 8.6 por ciento, subió al 9.2 por ciento en diciembre. Los Latinos son el segmento más joven y más creciente de la fuerza laboral de los Estados Unidos, sin embargo la capacidad económica de la comunidad Latina está en peligro.
El presidente electo Obama tendrá la responsabilidad de tomar medidas urgentes y adecuadas para cambiar el rumbo de la administración fallida y turbia que pronto heredará. Es crucial que el paquete de estimulo económico que se esta proponiendo le de prioridad a las familias de bajos recursos y comunidades de color que serán las más afectadas por esta crisis, en dicho contexto se debe asegurar una inclusión justa de la comunidad Latina.
La propuesta bajo consideración parece ser prometedora, pero posiblemente $775 billones no serán suficientes y un mayor enfoque en los más necesitados es necesario. Un paquete de estimulo que dé prioridad a las familias trabajadoras tiene que enfocarse en: la crisis hipotecaria e inmobiliaria, inversión en infraestructura, crear trabajos “verdes”, invertir en la investigación y el desarrollo de tecnologías de bajo consumo energético, y la ampliación y despliegue del acceso al internet de banda ancha a través del país. En algunas de esas áreas la comunidad Latina ya esta involucrada a fondo, otras representan áreas en las que nos tenemos que adentrar para conectarnos al futuro de la economía.
Las épocas de crisis requieren medidas audaces y acciones inmediatas para revitalizar nuestra economía y nuevamente atraer la prosperidad. Es necesario un plan de estímulo económico que incluya a las familias trabajadoras Latinas, que las eduque y las entrene para competir por las oportunidades de trabajo que se crearán en una economía nueva, más eficiente y sostenible. El paquete de estimulo propuesto por el presidente electo Obama es un paso en la dirección correcta, pero esta asistencia tiene que asegurar que los grupos más vulnerables de nuestra sociedad sean protegidos y que se otorguen las bases necesarias para que la clase trabajadora pueda escalar a la clase media.